El presidente de Duro Felguera achaca al proyecto de Argelia el preconcurso del grupo tras recibir 120 millones de la Sepi

Eduardo Espinosa Bustamante, presidente de Duro Felguera, en una carta a la plantilla, achaca a proyectos deficitarios como el de Argelia la crítica situación actual del grupo, en preconcurso de acreedores, después de haber recibido una inyección de 120 millones de euros públicos en 2021 y una aportación privada de otros 90 millones.

La centenaria compañía asturiana comunicó el miércoles a la CNMV haber presentado ante los Juzgados de lo Mercantil de Gijón «solicitud de comunicación de negociación con acreedores del artículo 585 de la Ley Concursal». En un comunicado enviado por el presidente de Duro Felguera el miércoles por la tarde –«estimados compañeros/as»–, Espinosa Bustamante aseguró a la plantilla que se trabajará «incansablemente para intentar conseguir la aprobación de un plan de reestructuración que resuelva los problemas de la compañía«.

«Algunos proyectos deficitarios, como el de Argelia, han arrastrado a la compañía a una situación difícil», dice el ejecutivo en su carta. Espinosa Bustamante subraya que la presentación del preconcurso «no implica el cierre de nuestra compañía, ni constituye el inicio de concurso de acreedores».El presidente de la multinacional asturiana asegura que se abre ahora una «ventana de negociación con los distintos acreedores en un marco legal que permite a la compañía proteger sus activos y contratos con el objetivo de suscribir un plan de reestructuración».

El pasado mes de noviembre, Duro Felguera recibió en Argelia solicitud de arbitraje presentada por Sonelgaz Production d’Electricité, en la que reclama una indemnización de 349,2 millones de euros.

Dicha solicitud ha provocado la necesidad de dotar una provisión de 100 millones de euros, por el contrato del proyecto Djelfa, en Argelia, para la construcción de una central de ciclo combinado, del año 2014.

Esa provisión implica que Duro Felguera tenga que reformular sus cuentas de los años 2022 y 2023, y también las del primer semestre del año.

Pero el de Argelia no es el único litigio millonario que afronta la compañía española. 

El pasado mes de julio la Fiscalía Anticorrupción requirió una sanción de 160 millones de euros contra Duro Felguera, por presuntos sobornos en Venezuela, una cantidad inasumible ahora para el grupo, que cotiza en Bolsa con un valor ligeramente superior a los 100 millones de euros (la cotización del grupo está suspendida desde el último lunes de noviembre).

En Dubai el grupo Dewa reclama a Duro Felguera unos 377 millones de euros por el proyecto Jebel Ali Power Station, por daños derivados de una terminación contractual en septiembre de 2020.

Aldama, Duro Felguera

La situación de Duro Felguera se ha enturbiado aun más tras algunas de las revelaciones del caso Ábalos y las declaraciones del presunto comisionista de la trama de las mascarillas, Víctor de Aldama.

Según datos del sumario publicados, el 16 de enero de 2020 -tres días antes del polémico e irregular aterrizaje en Madrid de la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez-, Ábalos escribió a Sánchez: «Para terminar de molestarte, la vicepresidenta de Venezuela viene en viaje privado el próximo lunes y quiere verme discretamente«. Y añadió. «La gestión que acordamos con empresas españolas ha permitido que Duro Felguera cobre una deuda importante». A lo que el presidente del Gobierno respondió: «Bien».

De acuerdo a las informaciones publicadas, la Guardia Civil duda de la veracidad de la información sobre Duro Felguera que comenta Ábalos, al no constar el pago al grupo español. 

Pero también incluye en su informe enviado al Juez que Víctor Aldama había preparado una intensa agenda de entrevistas a la vicepresidenta venezolana en su viaje a Madrid.

Entre otras, «se destaca la reunión que estaba prevista con el CEO de Duro Felguera». El informe de la UCO advierte que Aldama habría «asumido cierto papel de interlocución entre Duro Felguera y Venezuela».

Sepi, inversores mexicanos

La entrada de Duro Felguera en preconcurso de acreedores se produce después de haber recibido 120 millones de la Sepi y una inyección de 90 millones de los inversores mexicanos que se han hecho con el control del grupo.

La multinacional asturiana solicitó al fondo de rescate de la Sepi formalmente 120 millones de euros el 20 de agosto de 2020. El Consejo de Ministros aprobó la petición el 9 de marzo de 2021, el mismo día que concedió una ayuda de 53 millones a la aerolínea Plus Ultra.

Fuentes del grupo consultadas por este diario no se explican como la compañía ha podido ir a preconcurso tras esa ayuda pública y la apuesta por la compañía de los grupos mexicanos Grupo Prodi y Mota-Engil México, que han aportado 90 millones para hacerse con el control de grupo.

Duro Felguera y los inversores mexicanos Grupo Prodi y Mota-Engil México acordaron el pasado año préstamos por valor de 90 millones de euros para inyectar liquidez en la compañía española, préstamos que serían capitalizados con ampliaciones de capital, permitiendo a los inversores mexicanos tomar el control de Duro Felguera.El empresario mexicano José Miguel Bejos, cuyas empresas han sido agraciadas con contratos millonarios bajo el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador (Amlo) en México, está al frente de la inversión de Prodi y Mota-Engil en Duro Felguera.