La reincorporación de los trabajadores en ERTE se estanca
La falta de clientes y de transporte, la incertidumbre legislativa o el propio apalancamiento podría estar retrasando la vuelta al trabajo de los afectados
Ahora que media España se va a situar en la fase 3 de la desescalada cabría esperar que un gran volumen de los trabajadores en expediente de regulación de empleo (ERTE) pudiera volver a su normalidad laboral. Sin embargo, desde finales de abril cuando que se registraron las cifras máximas de afectados, solo se ha reincorporado un 14% —un 10% en Cataluña—.
Para Josep Ginesta, secretario de Trabajo de la Generalitat son muy pocos “teniendo en cuenta que en Cataluña el 50% son ERTE relacionados con la hostelería y el comercio”. También apunta a un posible apalancamiento por parte de las empresas para volver a la actividad, al diario La Vanguardia.
“La previsión de algunos expertos es que en diciembre se habrán recuperado el 50% de los ERTE”, lo que mantendría en la situación actual a 1,5 millones de trabajadores —según el presidente de Foment, Josep Sánchez Llibre—. Estas compañías podrían estar optando por la prudencia teniendo en cuenta que actualmente se pueden ahorrar el salario de los trabajadores y entre el 75 y el 100% de las cotizaciones sociales (excepto si voluntariamente quieren complementar su sueldo).
Además, tirar marcha atrás una vez se haya decidido reabrir puede tener un coste muy alto. Los abogados laboralisas indican que si una empresa reincorpora a un trabajador en ERTE y a lo largo de los siguientes seis meses despide a cualquier otro empleado debe devolver las cotizaciones sociales ahorradas.
Sánchez Llibre destaca como factores que ralentizan la vuelta al trabajo de los afectados la incertidumbre legislativa, la falta de clientes y de consumo, el transporte y la no apertura de escuelas, que dificulta la conciliación.
Otra explicación de la falta de reincorporación podría ser que una parte de los empleados (78.000) han pasado de ERTE completo a otro de suspensión (ERTE por días).
El 45% de los empresarios se plantea un reajuste de la plantilla
Lo cierto es que los empresarios se encuentran a la expectativa para escoger bien el momento de su desescalada y reducir los daños. Además, el Gobierno ha articulado una serie de bonificaciones para incentivar la salida de la situación de ERTE.
“La incertidumbre es muy alta y la normativa laboral que se ha aprobado en las últimas semanas genera mucha inseguridad jurídica”, dice Sanchez Llibre quién también pide “alargar los ERTE de manera indefinida y derogar la cláusula del mantenimiento de la plantilla” aprobada en mayo.
Josep Ginesta apunta también que si esta situación se prolonga en el tiempo, el Ejecutivo podría optar por retirar ayudas o bonificaciones a los ERTE, lo que perjudicaría “a los que realmente lo necesitan”.
El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, se negó esta semana a vaticinar cuántos de los casi tres millones de empleados en ERTE nunca volverían a sus puestos de trabajo. “No es momento de hacer previsiones”, señaló. Algunos sindicalistas en privado dicen que si se salva un 75% de los empleos será un éxito teniendo en cuenta las circunstancias.
Ángel Hermosilla, de Pimec, explica que una encuesta realizada entre los empresarios reveló que el 45% se planteaba algún tipo de ajuste de plantilla.