Damm presenta un ERTE y anticipa el desplome del sector cervecero
La compañía lanza un plan de despidos para toda la plantilla de su fábrica de El Prat (Barcelona) mientras manda al personal de oficina a teletrabajar
Aunque el coronavirus ha disparado buena parte de la demanda de alimentos, el brote también repercutió negativamente en la industria. Las largas colas en los supermercados no compensan, en muchos casos, el cierre de bares y restaurantes. Y el sector cervecero es un claro ejemplo. Ante el descenso de la demanda, las marcas ya reaccionan y Damm es la primera en presentar un ERTE para todos los empleados de su principal fábrica, la de El Prat de Llobregat (Barcelona).
Fuentes internas explican a Economía Digital que el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) se presentó para el alrededor de 450 los trabajadores ocupados en la planta del Baix Llobregat por «causas de fuerza mayor» La empresa se comprometió a complementar hasta el 80% del salario normal la prestación por desempleo y respetó las pagas extra y las vacaciones, detallan desde UGT.
La organización que preside Demetrio Carceller y los sindicatos llegaron a un acuerdo esta misma semana para un ajuste que no implica el cierre de la instalación. Desde CCOO añaden que el centro trabaja ahora a un tercio de su capacidad para hacer frente a la demanda que llega de supermercados y tiendas, y la carga podría ser modulable. La demanda cayó en picado después de que incluso incrementaran sus volúmenes en los primeros días de la crisis por el aumento de pedidos de los supermercados.
Damm sí incrementa la producción en su fábrica valenciana, centrada en la venta a supermercados
A los trabajadores que todavía se desplazan a la fábrica de El Prat se les dotó de mascarillas, guantes y geles desinfectantes. Además, se aplicaron medidas de distanciamiento para evitar aglomeraciones en el recinto.
Se da la circunstancia que mientras Damm pisa el freno en su fábrica catalana acelera en la planta de Estrella Levante, en Valencia. La cerveza producida allí es prácticamente toda enlatada y mucha va destinada a la marca blanca, por lo que el confinamiento incrementó su demanda a través de supermercados.
El ajuste afecta solamente al personal de producción. Los entre 400 y 500 trabajadores de oficinas realizan teletrabajo desde hace días.
Damm, la avanzadilla del sector cervecero
Damm se erige así en el primer gigante cervecero en verse obligado a aplicar un ERTE. No será el último, pues 8 de cada 10 euros que ingresa la industria procede de la hostelería. «El sector está terriblemente tocado», decía el sábado Jacobo Olalla, director general de la patronal, a Efe.
Las compañías asumen que el incremento de la demanda a través de supermercados no compensará lo perdido en la restauración. «Alguno puede pensar que lo que no se consume fuera se bebe en casa, pero esto no es lo que vimos en la última crisis», lamentó el ejecutivo. Entonces, la facturación de los bares cayó el 20% y no se compensó.
La patronal garantizó el abastecimiento y, como han hecho prácticamente todas las otras patronales pidió medidas específicas para su sector. Para merecerlas, justifican que el consumo de cerveza destacará especialmente por: la falta de partidos de fútbol, la suspensión de las Fallas de Valencia y la Feria de Abril de Sevilla, la prohibición de quedar con amigos e incluso «la falta de alegría» entre la población por el impacto del Covid-19.