Actualizado
CNMC: la opa de BBVA a Sabadell llevaría a un duopolio en 50 municipios y reduciría el crédito a pymes
La CNMC ofrece en una nota publicada hoy miércoles las razones por las que ha decidido seguir analizando la opa de BBVA sobre Sabadell.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) concluyó durante el análisis en Fase uno de la opa de BBVA sobre Sabadell que, si bien, a nivel municipal la operación no genera ningún monopolio, «resultará una estructura de duopolio en 50 municipios«.
Esta es una de las claves por las cuales el organismo decidió el pasado 12 de noviembre continuar con el análisis de la operación y pasar a Fase dos, en contra de los deseos y previsiones manifestadas por los ejecutivos de BBVA.
«La entidad resultante tendría incentivo y capacidad para modificar las condiciones a los clientes particulares y a las pymes, sin riesgo de perder clientes en favor de otra entidad, allí donde la resultante quedaría como único operador o con reducida competencia que pueda disciplinar su actuación», señala la CNMC en una nota sucinta publicada hoy miércoles sobre la opa.
Asimismo, podría ocurrir que, en ausencia de transparencia, «BBVA traspasase a los clientes de Sabadell hacia sus propios productos automáticamente, dándose la posibilidad de que los productos que venía ofreciendo, lo fuesen en condiciones menos favorables que las de la entidad adquirida», advierte.
Del mismo modo, añade, podría ocurrir que BBVA viniese ofreciendo «productos con mejores condiciones y que, por falta de transparencia, no informase a sus nuevos clientes provenientes de Sabadell de que sus condiciones podrían verse mejoradas tras la operación».
Cierre de sucursales
En aquellos municipios en los que la entidad resultante no se enfrenta a competencia, siendo estos un total de 8 municipios (1 de BBVA y 7 de
Sabadell), existentes con carácter previo a la operación, «podrían producirse cierres de sucursales«, dice la CNMC.
El organismo presidido por Cani Fernández recuerda que, en municipios con poca oferta de sucursales bancarias (muchas veces situadas en zonas rurales) «suelen habitar tanto personas mayores como aquellas que se consideran vulnerables financieramente, pues estos colectivos son los que habitualmente tienen menos acceso a la banca online, bien sea por falta de familiaridad con las plataformas o por imposibilidad de acceso a la misma o por falta de infraestructura que permita el acceso a la red en dichas zonas».
El cierre de sucursales en estos casos «provocaría que quedaran sin acceso a servicios financieros o provocaría su desplazamiento obligado a otros municipios próximos para poder satisfacer su demanda de servicios de banca minorista presencialmente en una sucursal».
Competencia también valora el riesgo de reducción de crédito a pymes que conllevaría la operación.
«El test de mercado no ha sido concluyente a este respecto«, dice, puesto que ciertos actores bancarios «consideran que las necesidades de diversificación de las pymes tras la concentración podrán ser satisfechas por otros operadores, mientras que las asociaciones identifican el riesgo mencionado».
Los informes económicos de BBVA y Sabadell «difieren en cuanto al nivel de diversificación de las pymes a nivel agregado y se observan algunas carencias en el modelo presentado por Sabadell, que cuantifica la posible reducción del crédito que pudiera resultar de la transacción».
Por otro lado, añade la CNMC, se ha constatado que la operación «produce una significativa concentración y elimina una fuerza competitiva relevante en varios mercados infranacionales«.
A la vista de todo lo anterior, concluye la dirección de Competencia, no se puede descartar «que la operación genere un riesgo de efectos unilaterales horizontales en forma de reducción del crédito a pymes, singularmente en aquellos ámbitos en los que la entidad resultante adquiere una posición significativa (…)».