CCOO se desmarca del acuerdo de Panrico
El sindicato estudia todas las posibilidades para impugnar el pacto y convoca nuevas asambleas
“La firma del ERE de esta noche no pone fin al conflicto de Panrico”. Ésta es la valoración que ha hecho Comisiones Obreras (CCOO) del acuerdo vinculante alcanzado de madrugada en la mesa de negociación.
El sindicato ha dejado en manos del gabinete jurídico la impugnación del pacto rubricado por nueve de los 13 miembros de la mesa –tres de ellos de CCOO–. Pero la agrupación liderada por Ignacio Fernández Toxo se desmarca del apretón de manos porque asegura que “los trabajadores siguen oponiéndose, y CCOO también”.
Más asambleas
Fuentes de sindicato sostienen que todavía no saben si la impugnación la presentarán de manera colectiva o si bien, lo hará cada trabajador a título individual. “Depende de qué vía usemos, irá a los juzgados de Catalunya (donde Panrico tiene su sede) o bien ante la Audiencia Nacional”.
Por el momento, los empleados de la planta de Santa Perpétua (Barcelona) están llamados a una nueva asamblea este martes. Votarán si mantienen la huelga indefinida o si optan por otras formas de presión más viables, indican los mismos interlocutores.
ERE en plantilla y autónomos
La empresa controlada por el fondo Oaktree Capital Management se aferra a que el acuerdo es vinculante y ha declinado valorar la postura de CCOO. Presentará lo antes posible el expediente de regulación de empleo (ERE) que afectará a 745 trabajadores así como la reducción salarial del 18% al resto de la plantilla. Estas medidas, que han llegado tras un tenso proceso de negociación, han evitado in extremis que Panrico presentara concurso de acreedores.
El acuerdo contempla que las extinciones se harán efectivas entre 2013 y 2016. Las salidas están sujetas a la evolución del negocio de modo que si mejora, el número de afectados podría reducirse. A los despidos en la plantilla se suma el ERE de 300 autónomos de la red de distribución así como una rebaja salarial del 15% para los 1.500 restantes.
Ventas e inversión
Los graves problemas de la compañía llegaron de la mano de la estrepitosa caída de las ventas. A ello se ha sumado que los propietarios decidieron dejar de invertir en la empresa del donut después de aportar casi 100 millones de euros sin recoger los frutos previstos.
Panrico perdió 225,1 millones en 2010 y 274,9 un año después, según los últimos datos presentados al Registro Mercantil. Ahora, con el acuerdo entre las manos, la dirección, liderada por Carlos Gila, espera mantenerse a flote pese al complejo entorno del mercado actual.