Cataluña pierde con la venta de Sabadell a BBVA al primer ‘socio’ de la Cambra, Foment y el Cercle
BBVA confirmó el martes haber trasladado su interés en explorar una "posible fusión" al presidente del Sabadell.
Cataluña perdería con la absorción de Sabadell por parte de BBVA a un socio histórico y determinante en las principales organizaciones empresariales de la región.
El banco presidido por Josep Oliu es un actor de primera línea en la Cambra de Comercio de Barcelona, en Foment del Treball y en el Cercle d’Economia, tres de las principales organizaciones que trabajan en representación y por las empresas catalanas.
BBVA comunicó el martes, al mediodía, que había trasladado al presidente del Sabadell «el interés del Consejo de Administración de BBVA en iniciar negociaciones para explorar una posible fusión entre ambas entidades», confirmando también que había contratado asesores para ello.
Una hora después del comunicado del BBVA a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, a las 14.23 horas, Sabadell informó que había recibido, a las 13:43 horas del martes, «una propuesta escrita indicativa de BBVA para una fusión». La entidad añadió que analizará «adecuadamente todos los aspectos de la propuesta».
La operación, estiman fuentes del mercado consultadas por este diario, superaría los 10.000 millones de euros, y en la misma podría acordarse un canje de acciones.
La ‘fusión’ entre BBVA y Sabadell daría lugar a un gigante financiero en España que competiría de tú a tú con CaixaBank y Santander. Pero previsiblemente sería el banco presidido por Carlos Torres el que impondría sus siglas, sede social, y la composición del consejo de administración.
Así, la impronta de Sabadell en las principales organizaciones y asociaciones empresariales catalanas se diluiría.
El papel del Sabadell en las últimas elecciones de la Cambra de Comercio de Barcelona, celebradas el pasado mes de septiembre, fue clave para retirar de la gestión de la organización, que representa a más de 400.000 empresas, a la candidatura independentista.
La entidad dio su aval a la candidatura liderada por Josep Santacreu, que se impuso a la rival Eines de País-Un pas més, independentista, asociación que se había hecho con el control de la Cambra cuatro años antes.
La pasada semana la Cambra creó una Mesa de Política Económica, integrada por 15 representantes de la empresa y el mundo académico catalán, entre ellos la economista jefe de Sabadell, Sofía Rodríguez.
Cercle y Foment
El exconsejero delegado del Sabadell, Jaume Guardiola, se presentó a mediados de 2022 a las primeras elecciones del Cercle d’Economia, el exclusivo lobby vinculado tradicionalmente a la alta burguesía catalana.
Con el apoyo de personalidades como el presidente del Sabadell, Josep Oliu, Guardiola se impuso en las elecciones y lidera desde entonces el Cercle.
Bajo su presidencia, la asociación empresarial creada en 1958 ha sido cercana a la figura de Alberto Núñez Feijóo, crítica con la alcaldía de Colau, y condescendiente con el Gobierno de Pere Aragonés.
También es estrecha la relación entre Sabadell y Foment del Treball, la principal patronal empresarial catalana, presidida por Josep Sánchez Llibre. En febrero del pasado año el banco acordó con la confederación un convenio a través del cual ofrece sus productos a los socios.
El presidente de Foment se ha propuesto impulsar el regreso de las empresas catalanas que abandonaron la Comunidad Autónoma tras los sucesos de 2017, entre ellas Sabadell, que trasladó su sede a Alicante.
En esa labor, la posición de Oliu y de la entidad financiera es determinante, pero hasta ahora el banco se ha mostrado escéptico respecto a un posible regreso a su antigua sede social.
La fusión de Sabadell con BBVA convertiría en fútil ese debate sobre el regreso del banco catalán a Barcelona.