Carlos Torres no es Felipe VI: la nueva presidenta de México y BBVA, a partir un piñón
El Rey Felipe VI no ha sido invitado a la toma de posesión de la nueva presidenta de México. Carlos Torres, el presidente de BBVA, no tendría ningún problema para sentarse en primera fila.
Carlos Torres no es el rey Felipe VI. Mientras que la nueva Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, se ha negado a invitar a su toma de posesión al monarca español, generando un conflicto diplomático, el presidente de BBVA tiene las puertas abiertas del Palacio Nacional.
La relación entre el segundo mayor banco español, el primero de México, y los Gobiernos de López Obrador y su pupila no puede ser mejor.
El pasado 7 de mayo, unas semanas antes de que se celebraran las elecciones presidenciales en México, la entonces candidata Claudia Sheinbaum acudió como estrella invitada a la Reunión Nacional de Consejeros Regionales 2024 de BBVA México, que inauguró Carlos Torres. «¿Ya se coció el arroz en materia electoral?», le preguntó el moderador. «Falta el trámite del 2 de junio», respondió Sheinbaum.
Carlos Torres, ante 400 empresarios, repasó en esa jornada las previsiones macroeconómicas de la entidad sobre la economía global y la mexicana en particular. BBVA prevé un crecimiento este año de la economía mexicana del 2,5%, «favorecida por el consumo interno y el aumento de la inversión, el mercado laboral está fuerte, y la envidiable posición estrategia del país», dijo Torres.
BBVA ganó el pasado año 2.755 millones de euros en España y 5.340 millones en México
El presidente de BBVA aseguró que el banco logrará este año y el próximo mejorar el beneficio histórico de más de 8.000 millones de euros conseguidos en 2023. Tan solo dos días antes de lanzar una opa hostil sobre Sabadell. «Lo que es bueno para México, obviamente, es bueno para BBVA», afirmó.
BBVA y México han tejido una relación de mutua dependencia. El banco, con 30 millones de clientes en el país, no conseguirá probablemente mejorar los resultados obtenidos en 2023 si la economía mexicana se tuerce. Y la economía mexicana se resentiría si la entidad se viera obligada a cerrar el grifo del crédito.
Del beneficio de 8.019 millones del pasado ejercicio conseguido por BBVA, el mercado mexicano supuso el 66,6%, sin considerar el Centro Corporativo de España, según los informes anuales publicados por BBVA en la CNMV.
Los resultados atribuidos fueron de 2.755 millones de euros en España; 5.340 millones en México; 528 millones en Turquía; 613 millones en América del Sur; y 389 millones en Resto de Negocios.
Los resultados e ingresos de las actividades ordinarias del banco ascendieron el pasado año a 16.665 millones en España, mientras que en México alcanzaron los 22.822 millones.
El grupo español cuenta con 1.706 oficinas en México (1.882 en España), y con 14.500 cajeros automáticos (4.720 en España).
El banco emplea en el país a 46.891 personas, frente a una plantilla en España compuesta por 27.510 personas.
La edad media de los empleados de BBVA en España es de 44 años, mientas que en México es de 34 años. La retribución media de los empleados en México (sin contar managers y directores), es de 16.000 euros anuales, frente a los 42.000 euros que reciben los empleados en España.
El pasado año, 30.000 familias mexicanas compraron una vivienda con financiación del banco español. Cerca de la mitad de los clientes digitales de BBVA, 22 millones, se encuentran en México.
El rey Felipe VI no acudirá a la toma de posesión de la nueva Presidenta de México. Carlos Torres, el rey de la banca en México, podría estar en primera fila.