Caixabank, Sabadell, Santander y BBVA exprimen los tipos y captan 13.000 millones más por intereses 

«La actividad crediticia se ha convertido en el motor de los resultados récord». Seguramente sea la oración más repetida por los banqueros de Caixabank, BBVA, Banco Santander y Banco Sabadell. Los principales bancos del país han disparado sus ingresos por intereses gracias a un entorno afable para la actividad crediticia, marcado por los elevados tipos de interés en la mayoría de los mercados en los que operan estas entidades.  

Además de los beneficios récord que han cosechado casi todos los bancos, no se puede perder de vista los ingresos por intereses que las principales entidades del país han cosechado durante 2023.  

Según los cálculos realizados por ECONOMÍA DIGITAL a partir de los informes financieros publicados por Caixabank, Sabadell, BBVA y Santander, los márgenes de intereses se han disparado hasta los 81.186 millones de euros, casi un 20% más en términos interanuales, o lo que es lo mismo 13.091 millones de euros más. 

Caixabank y Sabadell creen que la actividad bancaria tiene recorrido en España 

La banca española, como la europea, se ha valido de los elevados tipos de interés para catapultar sus ingresos por intereses. Al entorno de tasas oficiales al alza se ha sumado que la actividad crediticia ha sido mejor de lo esperada y que la morosidad sigue sin ser un grave problema para las entidades del sector. 

César González-Bueno, CEO de Sabadell, explicaba el pasado jueves durante la presentación de los resultados que «creemos que el margen de interés no ha tocado fondo en España«. La entidad sabadellense considera que la actividad bancaria aún tiene recorrido en el territorio nacional, visión que comparten los directivos de Caixabank. 

José Ignacio Goirigolzarri, presidente del banco con sede en Valencia, señaló el pasado viernes en la presentación de los resultados que la compañía se ha desenvuelto bien en un entorno «exigente», marcado por los mayores efectos de las subidas de tipos de interés. 

La banca crece en un entorno «benigno»

Como ambas entidades catalanas, Banco Santander y BBVA también remarcan el mayor crecimiento registrado en el último año gracias a los tipos al alza en todos los mercados en los que operan y «la manera correcta de lograr los resultados», como señaló Ana Botín el pasado miércoles cuando presentó los resultados récord. 

Los cuatro mayores bancos del país han crecido gracias a un entorno «benigno» para la actividad crediticia, como lo describió González-Bueno. Así, Santander, Sabadell, BBVA y Caixabank han cerrado un 2023 con unos ingresos por intereses casi 13.100 millones superiores a los registrados en el año precedente. 

En las cuentas de los cuatro bancos coincide que el margen de intereses ha crecido holgadamente, siendo Caixabank el que más crecimiento registra, con un ensanchamiento del 54% con respecto a 2022.  

Le sigue Sabadell, que ha elevado la facturación vía intereses un 24,3%: BBVA, con un crecimiento superior al 20%; y Santander, que registra la cuantía más elevada (43.261 millones de euros), pero un crecimiento porcentual del 12%. 

Es decir, la gran banca ha sacado partido a los tipos de interés al alza que, por ejemplo, en la eurozona cerraron el ejercicio sobre el 4,5%, siendo este el nivel actual.  

Los bancos confían en superar los resultados récord en 2024 

Aunque los banqueros de las principales firmas se hacen cuentas de que los organismos monetarios recortarán las tasas en los próximos meses, todos confían en que lo que está por venir es otro ejercicio récord.  

Santander, BBVA y Sabadell fueron los más explícitos: el objetivo es superar el ROTE de este año y, por tanto, los beneficios. Los grandes bancos confían en mejorar sus indicadores y justifican ese optimismo en que, aunque las tasas oficiales bajen y los ingresos por intereses sean inferiores, habrá mayor dinamismo de la demanda y, previsiblemente, menor morosidad.  

Gonzalo Gortázar, CEO de Caixabank, indicó que este es el escenario más próximo y lo ve afable para el desarrollo del negocio bancario.  

Los grandes bancos se agarran a que la morosidad aún sigue sin dar señas de que pueda suponer un problema severo para las entidades y que en el mercado se siente demanda, aunque más sostenida que la vista en los últimos meses.  

Está por ver lo que ocurre en el nuevo curso. Lo único seguro es que la banca está de dulce y los ingresos por intereses cosechados durante 2023 han disparado los beneficios hasta cotas nunca vistas.