Ocho de cada diez oficinas bancarias cerradas este año en España son de Caixabank o Sabadell
La banca española no quita el pie del acelerador y sigue cerrando sucursales en pos de la reducción de costes y de una mayor apuesta por la digitalización de todos sus procesos
La gran banca española no se sale del carril y continúa cerrando oficinas en 2023. En lo que va de año, las entidades financieras cotizadas del Ibex 35 se han deshecho de más de 340 sucursales solo en España, de las cuales, la mayoría pertenecen a Caixabank o a Banco Sabadell. Hasta septiembre, últimos datos disponibles, los dos bancos de origen catalán son los que más cierres de sucursales han acometido, movimiento que, como han expresado todos los banqueros, responde a una mayor apuesta por la digitalización y, por supuesto, a una reducción de la estructura de costes.
Son el banco liderado por Gonzalo Gortázar y el comandado por César González-Bueno los dos que, hasta ahora, cierran más sucursales en el territorio nacional. Pese a que la capilaridad de los bancos son uno de los puntos más importantes de sus respectivos negocios, todos ellos han trazado una estrategia que pasa por reducir sus redes para animar a los clientes a utilizar las aplicaciones. Es decir, restarle peso al trato personal y sumárselo a los procesos digitales, lo cuales, se han convertido en prioridades para la mayoría de las firmas del sector.
Caixabank y Sabadell cierran casi 300 oficinas de forma conjunta en España
Caixabank ha cerrado 196 oficinas en lo que va de año, mientras que Banco Sabadell se ha desquitado de 100 sucursales. Pese a que las dos tienen negocio internacional –aunque concentran casi la totalidad del mismo en España-, la mayoría del cierre de oficinas se ha producido a escala nacional. Esto también se debe a que la mayor red de oficinas tanto de Caixabank, como Sabadell, se encuentran en España.
En el caso de Caixabank, el efecto de la fusión con Bankia aún se palpa en el número de oficinas. Tal y como apuntan fuentes consultadas de la entidad, la reducción se debe a las «integraciones de sucursales que aún están pendientes tras la fusión y por la inversión en nuevas aperturas de oficinas Store». Este segundo motivo viene devenido a que el banco catalán está integrando en una macroficina a varias sucursales. La entidad aspira a abrir 80 oficinas Store en el presente curso, según indican a este medio desde Caixabank.
La banca cotizada del Ibex 35 ha cerrado hasta 341 sucursales en lo que va de año, según los últimos informes financieros
Como fuere, de las 341 oficinas menos que contabiliza la banca del Ibex 35 hasta septiembre, 296 son o de Caixabank o de Banco Sabadell. Es decir, más del 85% de las sucursales cerradas por la gran banca cotizada del país son de una de las dos entidades catalanas.
Aunque los bancos del país tienen proyectos en los que incluyen la lucha contra la exclusión financiera, la mayoría de ellos han acometido cierres tanto a escala nacional, como a nivel internacional.
Santander, BBVA y Unicaja también cierras sucursales
Así, por detrás de Caixabank y de Sabadell, aparece Banco Santander, que solo en España ha cerrado 32 oficinas en lo que va de año. A nivel internacional, la firma presidida por Ana Botín ha reducido su red en 367 sucursales menos que el pasado diciembre.
Tras Santander, aparecen Unicaja, que se ha deshecho de 10 oficinas, y BBVA, que ha cerrado tres establecimientos en los nueve primeros meses del año solo en España. Bankinter mantiene el propósito de no acometer ningún cierre. Por ello, hasta el tercer trimestre de este curso, el banco liderado por María Dolores Dancausa mantiene las 446 oficinas que tenía hace un año.
A nivel global, la banca española cotizada del Ibex 35 ha reducido su capilaridad en 774 oficinas menos en lo que va de año. Es decir, los cierres de sucursales no responden a una tendencia que solo ocurre en España, sino que la banca aplica a todos los mercados. Para las entidades financieras, el mantenimiento de los gastos, así como la reducción de los costes, es clave. Teniendo en cuenta lo que suponen las sucursales para estas firmas, éstas priman los cierres en pos del crecimiento digital.
La banca prioriza el crecimiento online
Esta estrategia, que adquirió relieve con la pandemia, está concebida para que los bancos rentabilicen mucho más sus procesos. Y en este entramado, la digitalización juega un papel esencial. Es por ello por lo que la mayoría de las grandes entidades nacionales han concentrado la mayoría de las ofertas en sus canales digitales.
Un ejemplo de ello es el propio Banco Sabadell, que hace un mes incluyó su cuenta online entre su catálogo de productos y, como apuntó César González-Bueno, el objetivo es engordar la base clientelar digital de la compañía bancaria. Como Sabadell, Santander, a través de Openbank, Bankinter con EVO Banco, o Caixabank con Imagin, han desplegado o mejorado distintas ofertas con el objetivo de atraer a más clientes, especialmente los más jóvenes.
Y es que los brazos digitales, por no tener sucursales y articular sus operaciones online, cuentan con una estructura de costes mucho más ligera que la de las matrices, algo que, a la larga, tiene un efecto positivo sobre las cuentas de la banca.
Críticas del Gobierno y de los clientes sénior
De un modo u otro, la banca, capitaneada por Caixabank y Sabadell, sigue cerrando oficinas en España. Pese a que todas ellas defienden dar un trato correcto a los clientes, sobre todo a los seniors, algunas personalidades, como Nadia Calviño, vicepresidenta primera del Gobierno y ministra para Asuntos Económicos, han advertido a las entidades de que «los mayores no están recibiendo el trato que merecen».
Como la política, instituciones como Asufin denuncian la exclusión financiera. Dicha institución informó recientemente que cerca del 90% de los mayores son instados a utilizar el cajero frente a la atención en ventanilla pese a que más del 35% considera que estos son difíciles de utilizar. Pese a esta estadística, Asufin también destaca que cada vez son más los clientes senior que utilizan las aplicaciones de los bancos. Tarde o temprano, la digitalización llegará a todos los públicos.