La Comisión Europea investiga la multa impuesta por España a las aerolíneas por cargos por equipaje de mano
La denuncia de múltiples asociaciones de aerolíneas resalta la necesidad de equilibrio entre la protección del consumidor y la libertad de precios en el mercado aéreo europeo
Archivo – Ryanair 737-MAX 8 Artwork.
Comentarios
La Comisión Europea ha comenzado una investigación preliminar contra España tras la multa de 179 millones de euros impuesta el pasado noviembre a aerolíneas como Ryanair, Vueling, Easyjet, Norwegian y Volotea. Esta sanción se debe a la práctica de cobrar suplementos por el equipaje de mano y por reservar asientos contiguos para acompañar a personas dependientes.
Proceso de investigación y plazos
Para llevar a cabo esta investigación, Bruselas ha iniciado un diálogo «informal» mediante el mecanismo ‘EU Pilot’. Según fuentes comunitarias, las autoridades españolas disponen de un plazo de diez semanas para responder al requerimiento de información que se les ha solicitado.
Una vez que se reciba la respuesta de España, el Ejecutivo comunitario tendrá un plazo adicional de diez semanas para evaluar la situación y decidir si se abre un procedimiento de infracción. No obstante, el mecanismo permite aplazamientos que pueden extenderse hasta un máximo de nueve meses para buscar una solución en el marco del diálogo informal.
Denuncias y apoyo a las aerolíneas
Esta acción de la Comisión Europea se origina a raíz de una denuncia presentada por la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), la Asociación de Aerolíneas Regionales Europeas (ERA) y Airlines for Europe (A4E). En sus declaraciones, las fuentes han indicado que la Comisión apoya las medidas de protección del consumidor siempre que estas estén alineadas con las normas del Mercado Interior y respeten la libertad de fijación de precios y la transparencia.
Además, el Ejecutivo comunitario sostiene el principio de libertad de precios establecido en el reglamento de servicios aéreos, ya que considera que esto contribuye a la reducción de costes para los consumidores y permite a las aerolíneas implementar estrategias competitivas a través de diversas ofertas de productos y precios.
