BlackRock asiste a la guerra entre Iberdrola y Repsol bajo presiones internas sobre ‘ecopostureo’
Las dos grandes empresas energéticas españolas se han lanzado acusaciones sobre sus negocios cuando su principal accionista tiene su propia ecrucijada
Iberdrola y Repsol han llevado su guerra a un punto de no retorno. Todo empezó con denuncias sobre ‘ecopostureo’ —y campañas publicitarias—, y se ha ampliado a las esencias propias del negocio de cada una. Uno de sus principales accionistas, BlackRock, asiste a esta pelea con sus propios problemas internos que gestionar en este materia.
La guerra entre Iberdrola y Repsol no se va a detener pese a que la petrolera dirigida por Josu Jon Imaz ha dado los dos primeros golpes. Ha sido a través del organismo Autocontol. Primero por una denuncia hecha por la eléctrica sobre ‘ecopostureo’; y esta semana a la inversa, ha sido Repsol la que acusó a la compañía de Ignacio Sánchez Galán, y ha ganado.
La situación va más allá de una cuestión comercial o publicitaria, se trata de ocupar un lugar en el negocio energético que cada vez está más comprimido. Al menos en Europa, y que afecta a los grandes accionistas de ambas compañías.
Ha trascendido a través de la prensa que los grandes fondos de Repsol darán su espaldarazo a los planes de la petrolera en la próxima Junta de Accionista que se celebra este viernes en Madrid. Se trata de una situación que pone el poco sobre el principal inversor, BlackRock, y sus propias guerras con el ‘ecopostureo’.
BlackRock mira de reojo a Iberdrola y Repsol
BlackRock es el principal accionista de Repsol con el 5,4% del capital, y el segundo dentro de Iberdrola con un 5,3%. Su ascendencia en ambas compañías es muy importante, aunque ahora mismo tiene sus propios asuntos que resolver en materia de ‘ecopostureo’.
Dentro del sector energético, a nivel bursátil —y a nivel global—, han surgido dos mundos paralelos. Cuando el cerco a los negocios petroleros y de gas ha ido en aumento en el último lustro, sus cuentas de resultados, dividendos y plusvalías para los accionistas ha ido en aumento.
En el lado contrario se encuentra el sector renovable. Un ejemplo cercano está en Acciona Energía o Solaria, cuyo comportamiento en el mercado se ha visto lastrado en los últimos trimestres.
BlackRock, con una cartera de inversión muy capilar por todo el mundo, de repente se ha visto sometida a una presión contraria a invertir en Estados Unidos en asuntos relacionados con la sostenibilidad.
Esta situación, junto a las continuadas denuncias públicas que ha recibido el fondo de inversión, precisamente de invertir por cuestión de ‘ecopostureo’, le ha llevado a revisar su estrategia. El CEO de BlackRock, Larry Fink, ha reconocido recientemente que la situación se ha politizado. Y el cruce de denuncias entre Iberdrola y Repsol es una muestra de ello.
Una situación diferente en Europa
Pero si la petrolera y la eléctrica han entrado en este cruce de acusaciones de publicidad engañosa es porque a Europa todavía no ha llegado esta tendencia contraria a la inversión sostenible, y esa sensación de que todo se hace por ‘ecopostureo’.
Los clientes europeos, para los diversos fondos, siguen siendo una prioridad. La Unión Europea sigue premiando las inversiones sostenibles, y eso lleva a compañías como Repsol e Iberdrola a tener pelearse por esa parcela.