BBVA descarta vender su filial argentina a la espera de que la economía del país mejore con Milei

BBVA descarta por ahora desprenderse de su filial en Argentina, a la espera de que la política económica impuesta por el nuevo Gobierno de Javier Milei de sus frutos y la entidad pueda mejorar sus cuentas.

El pasado mes de agosto varios medios argentinos publicaron el supuesto interés de inversores por adquirir BBVA Argentina. Entre ellos estaría la familia Eskenazi, dueña de entidades financieras en el país y antiguo accionista de la petrolera YPF.

La opa lanzada por BBVA sobre Sabadell, los cambios en la estructura acometidos por el banco presidido por Carlos Torres en su filial argentina, y la victoria judicial lograda por los Eskenazi en Nueva York por la irregular expropiación de la petrolera YPF a Repsol, dispararon los rumores sobre la posible operación.

El pasado 21 de agosto BBVA Argentina informó al regulador del mercado del país de una reorganización en su estructura, creando dos nuevas direcciones, Negocio Minorista y Negocio Empresas, sustituyendo a las anteriores direcciones de desarrollo de negocio y banca comercial, algo que el banco ha acometido a nivel global.

La reestructuración fue interpretada por varios medios del país como un paso previo a la venta de la entidad, después de que también el HSBC y el brasileño Itaú pasaran a manos de grupos financieros argentinos.

A ello se sumó el interés de BBVA por comprar Sabadell y su deseo de potenciar su negocio en el mercado español y europeo frente al latinoamericano, donde ya tiene una fuerte presencia en México y Venezuela.

La victoria judicial lograda por los Eskenazi frente a YPF -las sociedades de la familia argentina recibirán 14.385 millones de dólares, de los que 7.533 lo son por daños y 6.582 millones por intereses del 8%- también elevó las posibilidades de que se llevara a cabo la compra de BBVA Argentina, al disponer la familia de banqueros de financiación suficiente para llevar a cabo la operación.

Sin embargo, de acuerdo a fuentes consultadas por este diario en Buenos Aires, BBVA ha decidido congelar la venta de su filial argentina, a la espera de ver como evoluciona la economía del país bajo el nuevo Gobierno de Milei.

«Sí que hubo hace unos meses algunas conversaciones, pero ahora los bancos prefieren esperar a ver qué pasa con Milei, después de todo lo pasado y perdido en los últimos años con los anteriores gobiernos, poco hay que perder», comentaron.

En las cuentas del primer semestre presentadas por BBVA Argentina, la entidad señala que, en los últimos meses «la importante consolidación fiscal y la relativa estabilidad cambiaria, combinadas con una marcada caída de la actividad económica, han propiciado una desaceleración progresiva de la inflación«.

El banco añade que, a pesar de la incertidumbre y los riesgos asociados, «los ajustes en curso, junto con las medidas adicionales que podrían adoptarse en el futuro, podrían sentar las bases para que la inflación anual continúe desacelerándose a lo largo del año».

BBVA Argentina también advierte que, si bien la desaceleración económica podría comenzar a mejorar a partir de mediados de año, «se espera que el PIB caiga alrededor de un 4,0% en 2024 (sin cambios respecto de las previsiones anteriores) después de haber disminuido un 1,6% en 2023». El banco prevé que la inflación se sitúe a final de año en el 135% (con un sesgo a la baja), en comparación con el 211% a finales de 2023.

En el primer semestre del año, BBVA Argentina registró un beneficio de 103 millones de euros, un 4,5% más que en el mismo periodo del año anterior.

Los préstamos y anticipos a la clientela, no dudosos, ascendieron hasta los 3.944 millones de euros, frente a los 2.066 millones con los que cerró el ejercicio 2023. A 30 de junio de este año, los depósitos de clientes en gestión de BBVA Argentina casi se han doblado en seis meses, hasta los 6.119 millones.

Aun así, la hiperinflación que vive el país supuso en el primer semestre del año un impacto de 1.020 millones de euros para las cuentas de BBVA, frente a los 571 millones del mismo periodo de 2023. En el segundo trimestre, la tasa de mora se situó en el 1,6%, manteniéndose estable con respecto al trimestre anterior.

Desde BBVA se ha indicado a este periódico que ya en julio el consejero delegado de la entidad, Onur Genç, se refirió a las noticias sobre una posible desinversión en Argentina.

«Estamos muy cómodos con nuestra posición en el país; no comentamos rumores», declaró el ejecutivo.