Para BBVA, el Sabadell es «un bancazo» que encaja con sus planes de expansión
En los cursos de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, los asistentes recordaron que el término 'bancazo' había sido usado por el CEO del Popular en 2016 meses antes que la entidad fuera absorbida por el Santander
El responsable global de sostenibilidad y banca de inversión de BBVA, Javier Rodríguez Soler, afirmó este jueves que la opa sobre el Banco Sabadell, al que calificó como «un bancazo», se alinea perfectamente con los objetivos de la entidad.
Durante su participación en un curso de APIE en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander, Rodríguez Soler subrayó que la operación, que beneficia a «clientes, accionistas y empleados» del banco, será positiva, si se concreta, «especialmente para los accionistas del Sabadell».
A pesar del elogio de BBVA hacia Sabadell, algunos asistentes recordaron que el término «bancazo» fue el mismo utilizado en diciembre de 2016 por el entonces consejero delegado del Banco Popular, Pedro Larena, cuando se refería a la entidad que, apenas seis meses después, fue intervenida y vendida al Banco Santander por un euro.
Beneficios para accionistas del Sabadell
Según Rodríguez Soler, el beneficio «más obvio» de la oferta es para los accionistas del Sabadell, quienes «no se opondrán a una operación que crea valor para ellos». De hecho, ya han visto cómo la acción «ha tenido un recorrido importante» desde el anuncio, ya que el mercado «da por hecho que va a ocurrir».
En cualquier caso, Rodríguez Soler destacó que el Sabadell «es un gran banco», «uno de los mejores de España y del que hay mucho que aprender», no solo en materia de sostenibilidad sino en gestión global.
Por ello, la operación «nos encaja perfectamente», insistió.
El directivo evitó referirse al tiempo que pueda tomar la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) para autorizar la operación, algo que consideró «crítico». Sin embargo, señaló que los departamentos que trabajan directamente en la operación están «más ocupados que preocupados».