Luisa Gómez (BBVA) defiende las recompras de acciones: «Tienen todo el sentido»
"La reducción progresiva del número de acciones se traduce en un dividendo por acción que aumenta aún más año tras año", remarca la directora financiera de BBVA
La directora financiera de BBVA, Luisa Gómez Bravo, apuntó este lunes que el ejercicio 2024 «volverá a ser un gran año para BBVA» después de los beneficios récord que cosechó la entidad en 2023 y justificó que los programas de recompra de acciones tienen «todo el sentido si la acción cotiza por debajo de lo que consideramos que debería ser su valor».
En una entrevista publicada en la página web de BBVA, Gómez, que llegó al puesto en septiembre de 2023, señala respecto a los programas de recompra de la entidad, el último iniciado el lunes de la semana pasada por un importe de 781 millones, que desde noviembre de 2021, cuando el banco los inició, ha reducido el número de acciones en un 12%, cifra «muy relevante», y el último programa llevará la reducción al entorno del 14%.
«Las recompras tienen todo el sentido si la acción cotiza por debajo de lo que consideramos que debería ser su valor» y en el caso de BBVA, «la cotización actual no refleja el valor que pensamos que tiene nuestra acción», defiende la directora financiera de la entidad. De hecho, indica que el precio medio de las tres recompras de acciones que se han cerrado cerrado hasta la fecha ha sido de 5,52 euros por acción y hoy el banco cotiza en torno a los diez euros. «La reducción progresiva del número de acciones se traduce en un dividendo por acción que aumenta aún más año tras año», resalta.
Sobre el dividendo en efectivo de 55 céntimos por acción con cargo a los resultados de 2023, Gómez defiende que es «un dividendo muy elevado en perspectiva histórica» y en los últimos cinco años ha crecido más del doble desde los 26 céntimos de 2018. Según destaca, en ese periodo la entidad ha más que duplicado el beneficio por acción recurrente, desde 63 céntimos a 1,32 euros en 2023, y el ‘pay-out’ ha pasado del 37% al 50%, con lo que el banco habrá repartido solo en los últimos tres años 13.200 millones entre dividendos y recompras de acciones.
Por otra parte, la directora financiera de BBVA resalta que la pretensión del banco es el crecimiento orgánico basado en digitalización, innovación y sostenibilidad y asegura que «la capacidad de BBVA de combinar rentabilidad y crecimiento es única en el sector bancario europeo y nos diferencia de nuestros competidores». Gómez anticipa que, a futuro, seguirán invirtiendo «en crecimiento rentable bajo estrictos criterios de creación de valor» combinada con una remuneración «atractiva» para los accionistas.
De cara a las bajadas de los tipos de interés que se esperan por parte de los bancos centrales, la directora financiera comenta que supondrán «un cierto estrechamiento de los diferenciales de la clientela» pero que también «debería ser positivo a futuro para conseguir un mayor crecimiento de la actividad y mejores métricas de calidad crediticia». Considera que el banco se ha preparado para ese nuevo escenario y «en todos los países hemos mantenido y mantendremos una estrategia proactiva de crecimiento y ganancia de cuota, especialmente en aquellas carteras más rentables».
En materia de sostenibilidad, recuerda la meta de canalizar 300.000 millones en financiación sostenible entre 2018 y 2025, «objetivo que hemos triplicado desde que lo establecimos», y destaca que la oportunidad de negocio es «muy relevante».