La debacle de Erdogan en Turquía no trastoca a BBVA: «El impacto es muy limitado»
Garanti, la filial turca de BBVA, cerró la sesión de ayer marcando un alza inferior al 2%, lo que se traduce en un crecimiento de unos 60 millones de euros
La normalidad impera sobre Garanti, la filial turca de BBVA. La sesión bursátil de ayer estuvo marcada por la debacle de AKP, el partido que lidera el presidente Recep Tayyip Erdogan, en las elecciones municipales. El batacazo electoral tuvo un efecto mínimo sobre la cotización de la filial de BBVA, que cerró la jornada con un crecimiento del 1,90%.
Garanti puso el broche a la jornada post electoral valiendo alrededor de 8.520 millones de euros, unos 60 millones más que al inicio de ésta. La filial del banco español no sufrió, ni tampoco celebró, la derrota del partido del presidente en Bolsa.
AKP obtuvo el 35,5% de los votos frente al 37,7% que recibió CHP, el principal partido de la oposición. Los de Erdogan no pudieron recuperar ni Estambul, ni tampoco Ankara. La formación del presidente tampoco logró liderar los comicios en Esmirna y Bursa. Es decir, AKP perdió fuerza en las principales ciudades de Turquía.
La victoria de CHP, tildada de «histórica» por las espadas del partido, fue vista por el presidente del del Ejecutivo como un «punto de inflexión». Los expertos consideran que la población turca ha castigado la gestión del presidente del Gobierno, cuyo mandato sigue marcado por la crisis económica incesante.
BBVA ve con buenos ojos la nueva política económica de Erdogan
Erdogan revirtió la política monetaria en junio del pasado año, un mes después de ser reelegido presidente. Hasta el 26 de junio del ejercicio anterior, la gestión monetaria de Turquía pasaba por reducir los tipos de interés para tratar de incentivar el consumo y fomentar el ahorro en liras.
El resultado fue todo lo negativo que cabía esperar. La inflación se mantuvo en cotas elevadas y la moneda local no ha parado de devaluarse.
El nombramiento de Hafize Gaye Erkan como gobernadora del Banco Central de Turquía arrancó con el cambio de política monetaria. La primera variación de los tipos fue una subida del 8% hasta el 15% en junio de 2023.
Desde ese momento, el supervisor turco no ha dejado de elevar las tasas oficiales hasta ubicarlas en el 50% actual. Fatih Karahan, nuevo gobernador, aseguró que mantendría los tipos elevados durante el tiempo necesario para reducir la inflación, que actualmente se encuentra en un 67,1%.
Es precisamente ese cambio de política económica lo que ha reforzado el optimismo de BBVA en Garanti. Las alzas de los tipos oficiales, además de elevar el margen de intereses del banco español, se antojan como la vuelta a la ortodoxia económica en Turquía.
Desde el banco confían en que el efecto del endurecimiento monetario se dejará sentir en los próximos ejercicios. Torres aseguró que Garanti es un banco que podría ganar fácilmente unos 2.000 millones de euros en un entorno económico estable, que es a lo que aspira el país otomano con el vuelco monetario.
Una derrota con impacto mínimo para el banco
La entidad, que creció ayer un 1,90% en el mercado de capitales, marcó una jornada tranquila. Joaquín Robles, analista de XTB, considera que el fracaso de los de Erdogan en las elecciones municipales «tiene un impacto muy limitado» sobre el valor.
El experto cree que, aunque CHP se haya hecho fuerte en las principales ciudades turcas, aún es pronto para asegurar que estos resultados son el reflejo de lo que está por venir en el país.
Robles recuerda que las próximas elecciones presidenciales «no serán hasta 2028», por lo que «todavía quedan muchos años y hará falta comprobar cómo se desarrolla la gestión» del competidor de Erdogan.
El analista de mercado también apela a la respuesta del actual presidente y de cómo se verá por la ciudadanía, y por los inversores.
Garanti crece casi un 20% pese a la incertidumbre económico-política
Las subidas de tipos de interés cuentan con el beneplácito de los accionistas y de los potenciales inversores de la filial turca. Garanti mantiene la marcha alcista en el mercado de capitales, creciendo cerca de un 20% en lo que va de año. Buena parte de esa subida responde a la política económica del país.
El crecimiento registrado por la filial otomana de BBVA refleja que el valor camina al margen de las variaciones políticas. Hoy por hoy, la entidad ve con buenos ojos la estrategia económica del actual Ejecutivo.
Robles indica a este diario que «de cara a la próxima reunión de abril, se espera un incremento de 500 puntos básicos«, y BBVA «se está aprovechando de este aumento de márgenes, pero también sufre el deterioro económico y la menor demanda de crédito».
El valor ha aguantado bien la debacle electoral de AKP, que ha recrudecido la incertidumbre política del país. Los inversores tienen el foco puesto en la política económica de Turquía y de cómo podría elevar los beneficios de BBVA en un mercado en el que el pasado año ya ganó más de 500 millones de euros.