Barcelona desafía a Madrid para arrebatarle el trono en el mercado de los centros de datos
Las dos grandes ciudades, que concentran la mayor parte de los centros de datos del país, compiten por captar el interés de las multinacionales y atraer este tipo de inversiones a sus territorios
El interés por los centros de datos crece exponencialmente. Al jugar un papel esencial en el desarrollo de tecnologías como la inteligencia artificial, la realidad aumentada o el 5G, cada vez son más las compañías que apuestan por levantar este tipo de infraestructuras, que almacenan y tratan ingentes volúmenes de datos.
La fiebre por los centros de datos ha desatado una guerra entre las grandes ciudades del país, que luchan por acortar distancias con las urbes que lideran el sector a nivel mundial, como Frankfurt, Londres, Ámsterdam, París y Dublín, pero también por captar el interés de las multinacionales y atraer este tipo de inversiones a sus territorios.
Madrid lidera el sector
El liderazgo de Madrid en la carrera por el despliegue de centros de datos es claro. Si se pone el foco sobre la potencia instalada, se evidencia que se ha incrementado un 56%, pasando de poco más de 100 megavatios en 2022 a 164 megavatios en 2023, según los datos que proporciona el Gobierno de la Comunidad de Madrid, que también ponen de manifiesto que la región concentra el 80% de la capacidad instalada en el conjunto de la geografía española.
Madrid espera alcanzar los 613 MW en 2026
Bajo el propósito de mostrar su atractivo al sector, la comunidad autónoma ha emprendido distintas iniciativas. Un ejemplo es la puesta en marcha de la Oficina de Impulso a los Centros de Procesamiento de Datos de la Administración. Con el objetivo de captar 6.000 millones de euros hasta el próximo año, el organismo brinda una respuesta a la demanda de estas infraestructuras y guía a las multinacionales en los trámites a realizar con la administración pública.
La capital madrileña ha conseguido despertar el interés de grandes compañías del sector como Microsoft, que planea reforzar su inversión con la construcción de estas infraestructuras en Algete, Meco y San Sebastián de los Reyes. Actualmente, la región cuenta con una quincena de centros de datos en operación. Entre ellos, figuran los desarrollados por BBVA en Tres Cantos y en su sede corporativa en Madrid, así como el impulsado por la firma de telecomunicaciones NTT en Las Rozas.
La previsión es que la capacidad instalada en Madrid y los municipios colindantes continúe creciendo de forma progresiva en los próximos años. Mientras que para 2024 se espera alcanzar los 416 MW, para 2025 se proyectan 515 MW y para 2026 se quiere contar con 613 MW, una cifra que supondría una subida del 317%, según las proyecciones recogidas en el informe elaborado por la patronal de centros de datos Spain DC.
Barcelona redobla su apuesta
Entre las regiones que concentran una mayor capacidad instalada también se encuentra Barcelona, que vislumbra un crecimiento en su potencia, desde los 49 MW registrados el año pasado hasta los 173 MW el próximo año. La mayor parte de las instalaciones están enclavadas en las inmediaciones del Aeropuerto de El Prat, si bien Cerdanyola, una ciudad próxima a la capital catalana, está mostrando un gran potencial tanto por la disponibilidad del terreno como por la conectividad y la actividad empresarial.
Un grueso considerable de los proyectos que se están promoviendo en el sector de los centros de datos tienen previsto instalarse en el municipio, concretamente, en el Parc de l’Alba. Una ubicación elegida por compañías como Global Technical Realty, AQ Compute o Panattoni, que tienen intención de levantar centros de datos con una capacidad de 16 MW, 50 MW y 30 MW, respectivamente.
La cantidad de centros de datos que operan actualmente en las inmediaciones de la ciudad condal no alcanzan la decena. Entre ellos se encuentra la infraestructura construida por Merlin en la Zona Franca de Barcelona, con una capacidad de 13 MW, así como el centro de datos impulsado por Oxigen en Sant Cugat del Vallés, con una potencia de 6 MW.
La ubicación estratégica de la ciudad le brinda un gran potencial de crecimiento en los próximos años, al representar un «punto de conexión para el intercambio de datos y servicios digitales entre Europa, el Norte de África y Oriente Próximo», destaca el informe ‘Barcelona puerto digital del Mediterráneo’ de Digital Realty y DE-CIX, elaborado por la firma de análisis Foundry, con la colaboración de la Cambra de Comerç de Barcelona.
Aragón, polo de atracción
Factores como la escasez de suelo con potencia disponible en ubicaciones como Madrid está impulsando a los principales proveedores de este tipo de servicios a desarrollar sus proyectos en otros lugares. En este contexto, Aragón se está posicionando como una de las regiones más atractivas para albergar centros de datos en todo el país.
Por ejemplo, el gigante del comercio electrónico Amazon optó por construir sus centros de datos en Villanueva de Gállego (Zaragoza), El Burgo de Ebro (Zaragoza) y Huesca. Microsoft también ha avanzado que tiene intención de construir un campus de centros de datos en Aragón para empresas y entidades públicas europeas.
La disponibilidad de grandes parcelas de suelo, pero también el suministro eléctrico garantizado, el acceso a fuentes de energía renovables, la buena conectividad y la colaboración con las administraciones públicas se encuentran tras el éxito de la comunidad autónoma, cuya capacidad instalada alcanzará los 108 MW.
Así lo destaca un informe elaborado por la firma canadiense Colliers, que también advierte que otras regiones como Castilla La Mancha, el eje Bilbao-Navarra, Valencia, Málaga o Galicia están incrementando su capacidad instalada y sumando nuevos MW de potencia.