La banca aprovecha la demora del BCE por bajar los tipos para elevar su apuesta por el ahorro
Christine Lagarde, presidenta del BCE, dejó entrever en la última reunión monetaria que la primera bajada de tipos podría llegar en junio, lo que da margen a la banca para ajustar sus ofertas por el pasivo
La banca aún tiene recorrido para pelear por el ahorro de los clientes. La última decisión monetaria del Banco Central Europeo (BCE) ha valido para que las entidades bancarias aún tengan margen para ajustar sus ofertas por el pasivo.
El organismo continental decidió el pasado jueves mantener los tipos sobre el 4,5%, los más elevados desde 2001. El BCE tira de cautela y considera que «aún no ha llegado el momento» de realizar la primera bajada de tipos.
Esta decisión se antoja clave para las aspiraciones de aquellas entidades financieras que sí que han encontrado en el ahorro una vía para elevar su cuota de mercado. Aunque la guerra por el ahorro que el mercado preveía a mediados del año pasado no se ha producido, los bancos, independientemente de su tamaño, han desplegado varias ofertas en los primeros compases de 2024 que avivan la pugna por el pasivo.
El BCE da vida al mercado del ahorro
Las decisiones del regulador continental han sido un claro agitador de esta situación. Tal y como explican los expertos del comparador Kelisto, «el hecho de que el BCE vaya a tardar dos meses más en bajar los tipos ha ayudado a que las entidades tengan algo más de margen para jugar con la remuneración de sus ofertas, es evidente».
La institución liderada por Christine Lagarde prima la cautela y prefiere estar segura y ver un claro descenso del IPC antes de acometer la primera bajada de tipos. Los directivos del BCE apuntaron el pasado jueves que «quieren más pruebas» de que el índice de precios se precipita hasta el objetivo del 2%.
El discurso de Lagarde dejó entrever algo que la presidenta ya había expresado en los últimos meses: la primera bajada de las tasas oficiales podría darse en junio. Aunque varias casas de análisis apuntaban a que el BCE acometería la primera bajada de tipos en el primer trimestre, esa idea se ha difuminado.
La demora del regulador europeo a la hora de reducir las tasas se ha convertido en un argumento para que la banca ajuste sus ofertas por el ahorro. Los tipos permanecerán elevados por, al menos, lo que resta de año. Si bien se espera una bajada a finales del primer semestre o inicios del segundo, las tasas permanecerán en cotas elevadas durante 2024.
Abanca, Santander, Sabadell, Bankinter… la banca se mueve
Estas perspectivas sostienen la idea de que los bancos alarguen las ofertas competitivas por el ahorro y, hasta incluso, se lancen a desplegar otras nuevas, como se ha visto en los tres primeros meses de 2024.
Abanca con B100, Banco Santander, Bankinter, Cetelem o Banca March son solo algunas entidades que han lanzado nuevas ofertas, o han renovado las que ya tenían en sus catálogos con el objetivo de captar nuevos clientes o, como sostienen los expertos de Kelisto, para amarrar a los usuarios.
Abanca lanzó el nuevo banco digital, B100, que nace con dos cuentas remuneradas, una al 2,70% y otra al 3,40%; ayer el mercado conoció que Santander oferta depósitos personalizados que pagan hasta un 2,5%; Bankinter desplegó una nueva cuenta remunerada para pymes que paga un 3%; Cetelem ha ampliado su oferta con el lanzamiento de cuatro depósitos con una remuneración de hasta un 4%.
Sabadell con su cuenta online al 2% TIN, Openbank con el depósito a 12 meses al 3,05%, son otras opciones que los clientes tienen en el mercado.
En definitiva, la banca, al igual que otras empresas financieras, como las aseguradoras, mantienen la captación del ahorro entre ceja y ceja. El director financiero de Mapfre, Fernando Mata, explicó en la presentación de los resultados anuales que «mientras tengamos un escenario de tipos elevados, seguiremos vendiendo productos» vinculados al ahorro.
Interés creciente por el ahorro
La decisión de mantener los tipos al alza da margen para que las entidades financieras sigan trazando sus estrategias por el ahorro de los clientes. Desde el comparador Kelisto aprecian que «el interés de la banca por captar pasivo ha aumentado».
Los expertos señalan que, más que por obtener liquidez, algo que encaja más en la estrategia de las entidades de menos escala, la banca aprieta por el ahorro para amarrar a sus clientes.
De un modo u otro, «el retraso de las bajadas de tipos ayuda a que los bancos tengan más margen para jugar con las ofertas», como apuntan los especialistas del comparador. La banca española aún puede recrudecer la pugna por los ahorros de los clientes.