Los autónomos afirman que noviembre fue un mes «negro» para las pymes y la hostelería
UPTA ha alertado del cierre de más de 5.500 negocios en el pasado mes
La Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) ha asegurado este lunes que noviembre ha sido un mes «negro» para el sector del comercio y la hostelería y, además, ha alertado del cierre de más de 5.500 negocios el pasado mes.
Así ha valorado UPTA los datos de afiliación a la Seguridad social publicados este lunes, que reflejan que se han perdido 1.069 autónomos en noviembre. Por sectores, siguen siendo la hostelería (-3.041) y el comercio (-2.461) los que presentan peores resultados, perdiendo entre ambos 5.502 afiliados, y siendo los principales actores de los datos negativos junto a la industria manufacturera.
El resto de los sectores cierran el mes en positivo, destacando las actividades profesionales y la educación, que superan en ambos casos el millar de nuevos afiliados.
Ocho comunidades en negativo
Por territorios, ocho comunidades autónomas presentan saldos negativos en noviembre, volviendo a destacar entre estas, Islas Baleares, con una pérdida de afiliación relacionada con la estacionalidad, que roza los 3.500 efectivos. Entre las comunidades que pierden afiliación al RETA se encuentran Galicia (-431) y Castilla-La Mancha (-375). De las comunidades autónomas que cierran el mes en positivo, solo destaca la Comunidad de Madrid, con un aumento de 1.485 efectivos.
“Estamos hartos de alertar de la extrema situación en la que se encuentra el pequeño comercio y la hostelería de nuestro país. Las grandes cadenas comerciales y de distribución están acabando con el comercio tradicional y hay que adoptar medidas urgentes”, ha declarado el presidente de UPTA, Eduardo Abad.
Además, ha añadido que “hacemos de nuevo un llamamiento a los Gobiernos autonómicos para que tomen decisiones de inmediato o veremos como nuestros pueblos y ciudades se quedan sin servicios. Es una auténtica tragedia para miles de familias que vivían del sector más arraigado en las poblaciones de mediano y pequeño tamaño, con trayectorias profesionales muy longevas”.
“Asistimos incrédulos a la pasividad de las administraciones. Parece que es más rentable que se concentre la distribución de servicios de ocio y hostelería en los grandes grupos económicos”, ha sentenciado Abad.