Aena firma los contratos de handling tras el fracaso del recurso judicial de Iberia
La gestora de aeropuertos españoles convoca a empresas adjudicatarias y aerolíneas para un proceso de transición, mientras pide a Iberia aceptar la pérdida de licencias con "grandeza de ánimo"
Aena ha anunciado el inicio del proceso de firma de los contratos de las nuevas licencias de asistencia en tierra (‘handling’), tras la inadmisión por parte del Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales (TACRC) del recurso presentado por Iberia contra la resolución del concurso.
En un comunicado, la gestora de los aeropuertos españoles expresó la necesidad de avanzar en el cambio, convocando a las empresas adjudicatarias y a las aerolíneas involucradas.
La convocatoria, que incluye a Aseata, la patronal de las empresas de ‘handling’ que ganaron las licencias en el concurso público de septiembre, y a la Asociación de Líneas Aéreas (ALA), tiene como objetivo iniciar un diálogo comercial para que las aerolíneas contraten los servicios de las nuevas empresas de ‘handling’ o decidan optar por el ‘autohandling’. Aena planea completar este proceso antes del inicio de la temporada de verano de 2024.
Críticas a Iberia
En el comunicado, Aena reiteró sus críticas hacia Iberia, instándola a abandonar «actitudes poco edificantes» y aceptar con «grandeza de ánimo» la pérdida de licencias en algunos de los principales aeropuertos.
La gestora argumenta que otras empresas presentaron propuestas técnico-económicas superiores en el concurso, lo que resultó en la pérdida de licencias por parte de Iberia.
A pesar de la inadmisión del recurso por parte del TACRC, Iberia anunció su intención de recurrir ante la Audiencia Nacional y solicitar la anulación del resultado del concurso. El proceso, que renovó 41 licencias para 43 aeropuertos y dos helipuertos por siete años, generó controversia al otorgar la gestión del ‘handling’ en aeropuertos clave a otras compañías, en lugar de la filial de Iberia, que tradicionalmente había operado en esas plazas.
Además de Iberia, los sindicatos UGT y CCOO también impugnaron el resultado, alegando preocupaciones sobre el cumplimiento de obligaciones laborales por parte de las empresas ganadoras.