Así tributan los pisos turísticos
Los propietarios de la vivienda se encuentran en la obligación de desembolsar los impuestos pertinentes por alquilar la propiedad a turistas
El alquiler de pisos turísticos está sujeto al pago de distintos impuestos. Por ello, los propietarios que están sopesando destinar su propiedad al alquiler vacacional han de ser conscientes de las obligaciones fiscales que comporta, al tener un impacto notable en los márgenes de beneficio que obtendrán.
También se debe tener en cuenta que las personas con viviendas turísticas cuentan con la posibilidad de deducirse algunos gastos como los costes de mantenimiento de la propiedad, las tarifas de gestión o las facturas de servicios públicos, que pueden contribuir a recortar el importe a desembolsar al fisco.
Impuestos para alquileres vacacionales
Teniendo en cuenta que el año fiscal arranca el 1 de enero y concluye el 31 de diciembre, el fisco requiere a los propietarios que efectúen su declaración de impuestos anual antes del 30 de junio del año siguiente.
La responsabilidad de calcular y pagar los impuestos por el alquiler vacacional recae sobre los propietarios
Dado que es responsabilidad de los propietarios calcular y pagar la cuantía correcta en función de los ingresos que perciben por el alquiler, no deberán perder de vista los impuestos a pagar.
También es recomendable mantener unos registros en los que se concreten las cantidades que se ingresan, así como los gastos de alquiler que se efectúen en el transcurso del año.
Impuesto sobre la Renta
Uno de los impuestos a desembolsar es el que se aplica sobre la renta obtenida por el alquiler. La cantidad a pagar dependerá de la situación personal del propietario, pero también de su estado de residencia fiscal y la cantidad que genere por ceder su vivienda a turistas.
A pesar de que el gravamen suele estar comprendido entre el 19% y el 45%, en el caso de los ingresos procedentes del alquiler están sujetos a una tasa diferente que ronda el 19%, explica la compañía Checkin.
De esta manera, por ejemplo, los propietarios que al alquilar su vivienda a turistas ganen 10.000 euros al año habrían de pagar por el impuesto 1.900 euros.
Los propietarios de un piso turístico suelen pagar en el impuesto de la renta el 19% de los ingresos obtenidos
Cabe destacar que en el caso de las personas que no residan en España el porcentaje escala hasta el 24% de los ingresos del alquiler, independientemente de la cantidad generada.
Impuesto al Valor Añadido (IVA)
Los propietarios de pisos turísticos han de cobrar el Impuesto al Valor Añadido (IVA) sobre el importe ingresado en algunos casos. A pesar de que la tasa actual del gravamen es del 21%, algunos alquileres vacacionales pueden optar a tasas reducidas, del 10%. Un ejemplo son los alquileres de bienes raíces urbanos con fines de vivienda, a excepción de aquellos que incluyen servicios opcionales como limpieza o desayuno.
Conviene tener en cuenta que si se aplica la tasa reducida de IVA, no se puede deducir posteriormente el impuesto soportado en los gastos relacionados con el alquiler. Además, cuando se supera el límite de facturación fijado por el fisco es necesario registrarse y presentar declaraciones periódicas del impuesto ante la Agencia Tributaria.
Impuestos locales y tasas municipales
Quienes optan por alquilar una vivienda con fines turísticos también están sujetos a los impuestos municipales, que varían según la localidad en la que se encuentra la propiedad.
Entre los más comunes figura el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), que se concreta anualmente y toma como referencia el valor catastral de la vivienda, pero también la tasa de gestión de residuos y servicios de reciclaje.