Casi un tercio de los que vendieron su vivienda era para liquidar una herencia
Según un estudio de la Federación Nacional de Asociaciones Inmobiliarias el perfil del comprador es una persona de más de 40 años, en pareja y con dos hijos. El principal motivo en las transacciones es el deseo de mudarse de la primera residencia
Un 30,8% de los vendedores de viviendas en el año 2023 tenían la intención de liquidar una herencia, lo que supone la segunda razón para realizar esta operación solo por detrás del deseo de cambiar de primera residencia, algo que tenían el 35,1% de los que vendieron una vivienda.
Es una de las conclusiones del estudio del perfil tipo de las personas compradoras y vendedoras a través de agencias inmobiliarias durante 2023, realizado por la Federación Nacional de Asociaciones Inmobiliarias (FAI).
Así, tras los dos motivos mayoritarios para vender una vivienda durante el año pasado se situaron la necesidad económica (8,2%), el cambio de segunda residencia (5,3%) y la venta para recuperar la inversión al adquirir la propiedad (4,8%).
En cuanto al perfil de estas personas que pusieron en manos de las agencias inmobiliarias la gestión de la venta de sus viviendas, el 86,9% fueron pequeños propietarios con una o dos propiedades. La media de edad se situó en los 53,08 años, siendo el perfil mayoritario el de las personas de entre 50 y 60 años (44,7%), seguido del de entre 40 y 50 años (31,1%) y el de las personas de entre 60 y 70 años (17,5%).
La procedencia stock de viviendas que ofertaron las inmobiliarias en venta fue, en el 49,4% de los casos, de inmuebles utilizados como residencia y el 30,2% de liquidaciones de herencia. Con menor porcentaje, el 12,5% eran inmuebles que antes estaban alquilados, el 2,7% pertenecían a fondos de inversión, el 2,4% procedían de ejecuciones hipotecarias, el 2,1 eran propiedades de promotoras y el 0,8% eran propiedades de grandes tenedores.
Compradores
Por el contrario, el perfil mayoritario de comprador tiene una media de edad de 41,4 años y suele constituir mayoritariamente una pareja con hijos (43,1%). Asimismo, aumenta ligeramente el perfil de parejas compradoras sin hijos (del 35,7% al 37,6%), desciende el de personas solas ( del 18,7% al 15,2%) y aumenta el de empresas (del 2,8% al 4%).
El principal uso de la compra de vivienda es la primera residencia. El principal motivo de compra de vivienda habitual continúa siendo el de propietarios que cambian de casa, con un ligero descenso respecto a 2022 (del 63,2% al 61,2%) y aumenta ligeramente el número de personas que compran porque se emancipan (del 19,2% al 21,4%). La adquisición por parte de las personas que cambian el alquiler por la compra se mantiene prácticamente igual (17,5% en 2022 y 17,3 % en 2023)
El precio medio más demandado para la compra pasa de 168.522 euros en 2022 a 183.609 euros en 2023. El 25,8% de los compradores demandaron una vivienda de entre 150.000 y 200.000 euros, seis puntos más que en 2022. En cambio, se redujo del 37,4% al 31,3% los demandantes de viviendas de entre 100.000 y 150.000 euros.