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Esto es lo que pasa si tu empresa te pilla de vacaciones estando de baja
La Seguridad Social detalla qué actuaciones pueden considerarse fraudulentas y llevar a la pérdida de la prestación
Los trabajadores tienen derecho a la baja médica, es decir, a recibir una prestación económica para cubrir las necesidades que ocasionan la pérdida de salarios por imposibilidad de trabajar, sea por una enfermedad o accidente, por el que el empleado no puede acudir a su puesto de trabajo. Esta situación puede durar días, semanas o meses, por lo que en algunas ocasiones puede coincidir con el período de vacaciones.
El Estatuto de los Trabajadores marca como derecho fundamental las vacaciones de mínimo 30 días naturales por año trabajado, en las fechas que cada trabajador negocie con la empresa siguiendo siempre lo que establece el convenio colectivo correspondiente. Pero, ¿qué sucede si un empleado se va de vacaciones cuando está de baja?
En España no hay ninguna ley que prohíba irse de vacaciones durante una baja laboral. En ningún apartado se especifica que el empleado no pueda salir de su casa o desplazarse fuera de su comunidad autónoma o provincia.
Sin embargo, la Seguridad Social detalla qué actuaciones podrían considerarse fraudulentas y en las que el trabajador podría llegar a perder el subsidio por la baja.
De entrada, la normativa marca que el empleado sí que puede viajar y desplazarse siempre y cuando predomine el «sentido común». Todo depende de su incapacidad temporal, su dolencia y la gravedad de esta.
Retirada de la baja laboral
La idea que es que las vacaciones o el desplazamiento no influyan en limitar ni perjudicar la recuperación médica del trabajador. Por ello, si la Seguridad Social considera que el empleado está actuando de forma fraudulenta incumpliendo las recomendaciones dadas por los profesionales médicos, podría suspender o extinguir el cobro de la prestación.
De la misma manera, no acudir a las consultas o revisiones médicas a causa del viaje, o abandonar un tratamiento sin previa autorización, también conllevarían la pérdida de la prestación.
En estos casos, la empresa podría sancionar e incluso despedir al trabajador por transgresión de la buena fe contractual. El despido será procedente si la empresa demuestra que las actividades realizadas por el empleado durante su baja fueron incompatibles con su recuperación.
Vacaciones y salud mental
En cambio, en bajas por depresión o ansiedad, precisamente se recomienda a los trabajadores salir de casa e incluso viajar a otros lugares para generar impactos positivos para su salud mental y su pronta recuperación. Estos desplazamientos pueden reducir el estrés y mejorar el estado de ánimo, combatiendo la depresión y la ansiedad.
Asimismo, en casos como bajas por embarazo habrá que seguir las recomendaciones del médico sobre si el viaje y las actividades llevadas a cabo son compatibles con la salud de la mujer y el feto; y, tras una operación quirúrgica, se tendrá que acreditar que las vacaciones no han impedido la recuperación o empeorado la enfermedad.
Al contrario, si al trabajador se le ha prescrito reposo absoluto, no podrá realizar ningún viaje durante su baja.
Recuperación de los días de vacaciones
Por otro lado, puede suceder que la baja médica coincida con los días de vacaciones asignados al trabajador. Antes estos días se perdían, pero ahora la situación ha cambiado, tras la jurisprudencia marcada por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea y del Tribunal Supremo.
Ahora, según el artículo 38 del Estatuto de los Trabajadores, el empleado podrá volver a solicitar sus días de vacaciones cuando vuelva a la empresa, siempre dentro de los 18 meses siguientes, poniéndose de acuerdo con el empresario al fijar las fechas.
Además, estando de baja se siguen generando derecho a días de vacaciones. Por lo tanto, si un trabajador está de baja seis meses, seguirá teniendo las mismas vacaciones que un trabajador que esté trabajando durante ese mismo periodo de tiempo.