Urkullu requiere ante el Rey «dar forma a los Perte regionales» y dice que los fondos europeos llegan a cuentagotas

El lehendakari del Gobierno vasco, Íñigo Urkullu, ha requerido hoy en presencia del rey Felipe VI «la urgencia de dar forma a los Perte regionales«, una reivindicación sobre la que insisten también los gobiernos de Cataluña y Galicia.

Felipe VI ha inaugurado hoy lunes el XXVI Congreso Nacional de la Empresa Familiar, que se celebra en Bilbao hasta el martes, y al que acuden cerca de medio millar de representantes de grandes compañías familiares españolas, con intervenciones destacadas como las de la presidenta de Santander, Ana Botín, o del presidente del grupo Acciona, José Manuel Entrecanales.

Urkullu ha ofrecido un discurso de bienvenida a los asistentes en el que ha planteado «la urgencia de dar forma a los Perte Regionales, de forma que los fondos europeos dirigidos al tejido productivo se empleen con éxito en proyectos estratégicos alineados con Europa».

De lo contrario, ha advertido, «se corre el riesgo de dejar pasar esta oportunidad de futuro». Euskadi, ha dicho, «plantea activar, de una vez por todas, a los Gobiernos regionales como actores protagonistas para canalizar y distribuir los fondos europeos a nuestras empresas, tercer sector, centros tecnológicos y universidades».

«Esto fondos llegan a cuentagotas al tejido productivo», ha afirmado Urkullu. «De los 24.500 millones de euros en subvenciones disponibles para los Perte, el Gobierno español ha distribuido 6.350 millones en estos tres años, solo el 26%», ha lamentado, y ha recordado que el plazo para utilizar estos recursos expira en 2026.

A finales del pasado mes de septiembre, el consejero de Economía y Fondos Europeos del Gobierno vasco, Iñaki Barredo, informó que Euskadi ha recibido 1.657 millones de euros de los fondos europeos, de los cuales el 63,2% son operados a través del Gobierno vasco y el 36,8% por el Estado.

El rey Felipe VI ha homenajeado la labor de la empresa familiar en España en su discurso de inauguración del congreso que se celebra entre hoy y mañana en Bilbao.

«Constituís un auténtico pulmón económico en estos territorios y contribuís a una verdadera vertebración del país», ha dicho. «Vuestra presencia y compromiso son garantía de futuro para muchas personas».

«Ante la incertidumbre y los desafíos, las empresas siempre deben formar parte de la solución, en cualquier circunstancia y situación», ha declarado Felipe VI. «El esfuerzo, el liderazgo y el sentido de responsabilidad, son esenciales en la búsqueda y logro de objetivos. Las empresas familiares, además, tenéis la ventaja de conocer mejor que nadie los problemas y necesidades de vuestro territorio y sector».

Escrivá sustituye a Sánchez

En la inauguración del evento ha aparecido, por sorpresa, el ministro de de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, cuya intervención no estaba prevista en el programa del congreso.

El Ministro ha ofrecido un discurso de menos de cinco minutos, con anterioridad a los del lehendakari y del Rey, sin ningún mensaje relevante, en el que ha destacado el papel del empresariado español en general.

Fuentes de la organización del Congreso han indicado a este diario que la intervención de Escrivá responde a que se trata de dar presencia a un representante del Gobierno, ante la ausencia prevista del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien había sido invitado para cerrar el evento.

Sánchez sólo ha participado como Presidente del Gobierno en el Congreso Nacional del IEF que se celebró en Valencia en 2018, recién elegido para el cargo. Tras los leves pitos recibidos en el acto, Sánchez no ha vuelto a acudir a ninguna cita con los representantes de la empresa familiar, a pesar de que todos los años ha sido invitado.

Faltan ingenieros y camareros

El presidente del Instituto de la Empresa Familiar, Andrés Sendagorta, en su discurso de bienvenida, ha incidido en la dificultad que la empresa española está teniendo para contratar profesionales en diversos ámbitos. «Nos faltan ingenieros e informáticos, pero también personas que trabajan en el mundo de la hostelería o el mundo industrial«, ha declarado.

Sendagorta también ha reclamado una mayor apuesta por la educación y formación a largo plazo. «Tengo la impresión de que se destina más tiempo en nuestro debate público a subrayar rasgos ideológicos que a apuntalar los objetivos reales que deberían perseguir nuestros programas educativos», ha lamentado.

También se ha referido al «principal desequilibrio de la economía española», el desempleo. «Ahí está la principal causa de las desigualdades sociales, el auténtico freno al ascensor social, a la esperanza de un futuro mejor para nosotros y nuestros hijos».