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UGT respalda las protestas agrícolas y advierte a la UE: «La competencia con países terceros es insoportable»
Pepe Álvarez califica de "justas" y "razonables" las reivindicaciones del sector del campo y aboga por aplicar criterios uniformes en importaciones para no perjudicar a los productores comunitarios.
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, calificó este martes de «justas» y «razonables» las reivindicaciones del sector del campo y advirtió a la Unión Europea de que «la competencia con países terceros es insoportable», ya que, por ejemplo, «lo que es maltrato animal en Europa» lo debe ser también fuera cuando se importan productos.
Así lo manifestó Álvarez en declaraciones a los medios en el marco de la jornada ‘Igualdad y diversidad en empresas de seguridad’, organizadas por UGT en Torre Ilunion, en Madrid, al ser preguntado por su opinión sobre las tractoradas que este martes están llevando a cabo agricultores y con las que están dificultando el tráfico en algunos puntos de España.
Al respecto, señaló que suele ser «bastante prudente en relación con las convocatorias, los plazos», teniendo en cuenta que UGT es «una organización que siempre o casi siempre» cumple con las obligaciones legales para convocar protestas.
«Lo que realmente me importa son las reivindicaciones de los agricultores de nuestro país. Y quiero decir que me parecen justas, son razonables y la Unión Europea tiene que dar una respuesta positiva», añadió Álvarez.
En este sentido, resaltó que tras la pandemia se dijo que los sectores esenciales «iban a tener un trato específico especial» y defendió que «la agricultura lo era antes, lo fue durante y lo es en estos momentos».
Así, el líder sindical denunció que la burocracia «ahoga la posibilidad» de que las ayudas de la Política Agraria Común (PAC) se puedan distribuir «de manera adecuada», sobre todo en el caso de pequeños y medianos agricultores.
Además, reclamó que las exigencias en materia de bienestar animal o sobre garantías sanitarias se apliquen también a las importaciones que se realizan desde países terceros de la UE para no perjudicar a los productores comunitarios.
«Las mercancías que entran a la Unión Europea tienen que estar tratadas con los mismos criterios tanto de sulfatos como de garantías de respeto a los animales», aseveró Álvarez, quien pidió al Gobierno que haga «cumplir» la Ley de la cadena alimentaria.
A su juicio, esta normativa es «un elemento extraordinariamente positivo» que, eso sí, «ahora hay que implementarla» con medios suficientes para exigir su cumplimiento.