El Tesoro ya contempla que se retrase la llegada de fondos europeos
La estrategia para este año tiene en cuenta todos los escenarios, incluidos los retrasos en los desembolsos y en la ejecución del Plan de Recuperación
El Gobierno ya contempla la posibilidad de que los 25.600 millones de euros procedentes de los fondos europeos Next Generation EU que deberían llegar este año, entre préstamos y transferencias, puedan retrasarse o que la ejecución del Plan de Recuperación no siga los plazos previstos, aunque no creen que esto pueda afectar a las necesidades de financiación del Estado, aunque haya que adelantar los recursos si se dilata la recepción de los pagos.
Fuentes del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa, que dirige el recién nombrado Carlos Cuerpo, señalaron que la Estrategia de Financiación para este año, que prevé una emisión de deuda pública nueva por valor de 55.000 millones de euros, ya es lo suficientemente flexible como para poder suplir la ausencia de estos recursos europeos. Esto es porque los técnicos del organismo habrían incorporado a sus cálculos «distintos escenarios» en función de cómo se produzcan los desembolsos y la propia ejecución del Plan de fondos europeos.
El Tesoro ha especificado que, teniendo en cuenta estos supuestos, el Gobierno tendría margen suficiente para actuar no solo si no llegara el ‘maná’ europeo, pero también si hubiera una ralentización de la actividad económica superior a la prevista o si hubiera que adoptar nuevas medidas económicas que supusieran un mayor gasto público o una menor recaudación.
Solo llegaron 7.000 millones de fondos europeos el año pasado
La estrategia del año pasado contemplaba la llegada de 17.000 millones de euros procedentes de dos desembolsos del Plan de Recuperación pero el adelanto electoral trastocó todos los planes y solo se ingresaron 7.000 millones. La última petición se produjo en los últimos días del año pasado, tramitando las reformas pendientes a través de una serie de reales decretos-ley que hoy podrían caer, si no reciben el visto del Congreso de los Diputados. De hecho, como ha venido informando ECONOMÍA DIGITAL, desde noviembre del año pasado hasta ahora el Tesoro ya tiene que adelantar dinero para paliar la ausencia de nuevas remesas.
El propio ministro de Economía, Carlos Cuerpo, aprovechó su estreno en el Consejo de Ministros y en la rueda de prensa posterior para recordar que, si estos dos decretos (uno con la reforma del subsidio por desempleo que negoció Nadia Calviño y otro con varias modificaciones en el ámbito de la justicia y de la Función Pública) decaen, los 10.000 millones pendientes quedarán en el limbo.
«El elemento de prudencia del Tesoro nos permitiría hacer frente a cualquier casuística, pero es un elemento clave hacia delante y confiamos en que la suma de factores positivos que suponen estos reales decretos sean suficiente para garantizar su convalidación«, dijo el ministro.
En total, el Tesoro prevé una emisión bruta de títulos de deuda de 257.600 millones de euros, un 2% superior a la de 2023, motivado fundamentalmente por una mayor emisión de deuda a amortizar. En términos netos, es decir, de títulos de deuda nueva, el Gobierno estima que será de 55.000 millones de euros. «En términos relativos, esta emisión representa en torno al 17% de nuestro PIB. Con esta referencia nos iríamos a valores cercanos a 2018, cuando estábamos en valores del 18%. Nos ayuda a reforzar la sostenibilidad de nuestra deuda», valoró Cuerpo.