La subida de la pensión es una realidad: esta es la fecha de pago de los bancos en febrero
La revalorización de las pensiones es un proceso que tiene lugar de forma anual con el objetivo de adecuar las prestaciones al nuevo escenario económico
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El cobro de la pensión es un momento de satisfacción para las personas jubiladas. Especialmente, si se tiene en cuenta que la cuantía se ha incrementado este año tras la revalorización de las pensiones, un proceso que tiene lugar de forma anual con el objetivo de adecuar esta prestación al nuevo escenario económico.
Las pensiones que desembolsa la Seguridad Social en la modalidad contributiva, así como las pensiones ordinarias y extraordinarias del Régimen Especial de Clases Pasivas del Estado, al que pertenecen los militares y los funcionarios de carrera, verán incrementada la cuantía en un 2,8% este año.
Más acusado será el incremento que experimentarán las pensiones no contributivas y el Ingreso Mínimo Vital (IMV) que se revalorizarán un 9%, mientras que los beneficiarios de la pensión de viudedad que tengan cargas familiares verán crecer el importe un 9,1%.
Pensión contributiva y no contributiva
La pensión contributiva es una prestación económica vitalicia que se concede al trabajador cuando decide poner punto final a su carrera profesional o reduce su jornada laboral a causa de la edad. Para acceder a la jubilación ordinaria en esta modalidad es indispensable haber cotizado durante un periodo mínimo de 15 años, de los cuales al menos dos deben estar comprendidos en este periodo.
Tanto la edad como el periodo mínimo cotizado para solicitar la jubilación ordinaria se endurecen con el paso de los años. Mientras que el año pasado podían jubilarse con 66 años y 4 meses 65 años quienes hubieran cotizado 38 años, este año podrán hacerlo a los 66 años y 8 meses las personas con un periodo mínimo cotizado superior a 38 años y 3 meses.
Sin embargo, la pensión no contributiva es una prestación económica que se reconoce a los ciudadanos que carecen de recursos suficientes para su subsistencia, incluso cuando no hayan cotizado nunca a la Seguridad o no hayan cotizado el tiempo suficiente para poder solicitar las prestaciones contributivas.
A pesar de que la cuantía anual se establece cada año en la Ley de Presupuestos Generales del Estado, con carácter general se ha fijado en los 7.905,80 euros para este año. El importe individual para cada pensionista se determina a partir de ese importe íntegro y del número de beneficiarios de pensión no contributiva integrados en la misma unidad económica de convivencia.
Para cobrar la pensión de jubilación no contributiva es necesario:
- Tener 65 años o más en la fecha de la solicitud
- Residir legalmente en territorio español durante 10 años, entre los 16 años y la fecha de devengo de la pensión, de los cuales dos años tienen que ser consecutivos y anteriores a la solicitud de la pensión.
- Carecer de ingresos o tener ingresos inferiores a 7.905,80 euros anuales.
- Si el solicitante convive con familiares, la suma de las rentas o ingresos anuales de todos los miembros de su unidad económica de convivencia tienen que ser inferiores a las cuantías fijadas.
Cuándo paga cada banco la pensión
Los pensionistas que recibirán primero la pensión serán los de Bankinter, que percibirán la prestación el 21 de febrero, mientras que los de Banco Santander, Unicaja y Caixabank deberán de esperar al 24 de febrero.
Por último, los clientes de Abanca, BBVA, Cajamar, Ibercaja, ING, Kutxabank y Banco Sabadell deberán esperar hasta el 25 de febrero para ver ingresada en su cuenta la cuantía de la prestación pública.
