Sánchez y Rajoy disparan el gasto público a máximos históricos
El gasto público aumentó en 2018 al mayor ritmo desde 2009 y supera el medio billón de euros, el máximo histórico
Las recomendaciones que lanzan los organismos internacionales, como el Fondo Monetario Internacional (FMI), parecen caer en saco roto en España. Pese a que se ha solicitado que el país realice un ajuste del gasto público, en 2018 este recuperó los niveles previos a los grandes recortes que sufrió durante la crisis.
Así, se alcanzó el medio billón de euros, un máximo histórico. El año pasado esta partida registró un incremento de 22.515 millones, creciendo en volúmenes similares a los de 2004 o 2005, según publica El País.
Con esto, en 2018 se dio un cambio de tendencia y el gasto alcanzó un máximo histórico al tocar los 500.641 millones de euros, superando el anterior pico registrado en 2012 con 500.177 millones.
El porcentaje del gasto en función del PIB en España se sitúa en el 41,4%, por debajo de la media europea
Pese a que se ha recuperado la riqueza en euros, el porcentaje del gasto en función del PIB se sitúa en el 41,4%. Así, en relación con la riqueza del país sigue muy lejos del 48,1% que se contabilizó en 2012, en parte porque el PIB entonces caía hundiendo el denominador.
Aún así, todavía está a gran distancia de la media de la UE, que se encuentra en el 45,8% del PIB (47% en el caso de la zona euro), según cifras de Eurostat de 2017.
El medio billón de euros tampoco representa lo mismo que en 2012 en cuanto a poder de compra, dado que entre ese año y 2018 la inflación fue del 7,2% y, en consecuencia, ese gasto en realidad resulta un 7,2% menor. Enc uanto a partidas, ganan peso las pensiones y partidas a funcionarios y caen las inversiones y el I+D.
Gastos por encima del crecimiento económico
En 2018, el gasto creció un 4,7%, por encima de lo que aumentó el PIB incluyendo la inflación, un 3,6%, por lo que los desembolsos de la Administración crecen por encima de lo que mejora la capacidad económica.
Este aumento fue acompañado por el crecimiento de la recaudación, que se disparó un 6% casi duplicando lo que creció la economía. Esto redujo un poco el desfase presupuestario entre ingresos y gastos.
Sin embargo, en relación al PIB los ingresos están en el 38,8%, por debajo del 41% registrado en 2007. Y distan mucho del 44,8% recaudado en la UE y del 46,1% de la zona euro.
Además, la Comisión Europea critica que la mejora de los ingresos se deba exclusivamente al ciclo económico, y no a reformas que aseguren que la recaudación sea estructuralmente más alta. En consecuencia, de producirse una recaída de la economía, puede correrse el riesgo de que se repita lo ocurrido al inicio de la crisis.
Un tercio de los 22.515 millones que ha aumentado el gasto se debe a las transferencias sociales
Un tercio de los 22.515 millones que ha aumentado el gasto se debe a las transferencias sociales, que suben en 7.382 millones por las pensiones. Estas se elevan por dos motivos: la revalorización que pactaron PP y PNV. Y la incorporación de un mayor número de pensionistas, que además cobran prestaciones más altas por haber cotizado más.
La partida de personal engorda en 3.972 millones, un 3,2%, pese a que la revalorización que acordó el Gobierno de Mariano Rajoy fue hasta el 2%. De modo que un tercio del incremento es por contrataciones.
Aunque el presidente socialista Pedro Sánchez ha disparado el gasto público, una parte de estos gastos -la mejora de pensiones y sueldos de funcionarios por valor de 6.000 millones-, ya los había aprobado el Ejecutivo popular. Además, la inversión sumó 2.981 millones, el 13% más coincidiendo con la proximidad de las elecciones.
