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Sánchez evita hablar de impuestos ante las multinacionales y dice que aumentar beneficios «es legítimo»
El presidente del Gobierno ha advertido que las compañías "tienen que implicarse y preocuparse por el impacto social de su actividad económica"
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha clausurado el Congreso por el décimo aniversario de la asociación Multinacionales con España, evitando mencionar explícitamente la política fiscal del Ejecutivo, pero respondiendo veladamente que las grandes compañías han de «preocuparse» por el impacto de su actividad económica en el país.
Sánchez ha asegurado que aumentar beneficios «es legítimo» y que «para eso están las empresas». «Pero también tienen que implicarse y preocuparse por el impacto social que genera su actividad económica sobre el territorio y el país en el que operan», ha advertido el jefe del Ejecutivo ante la plana de empresarios, con representantes de grandes compañías como Amazon, Meta o Apple.
El mensaje llega una semana después de que su Ejecutivo tomara posesión y tras el compromiso de investidura de llevar la tributación mínima de las grandes compañías al 15% de su resultado contable y no de la base imponible. Una medida, basada en negociaciones internacionales, que supondría 10.000 millones más a las arcas públicas, de acuerdo con los cálculos estimados por el Gobierno.
El jefe del Ejecutivo ha apuntado que «después de muchos años de dogmas desfasados», la sociedad ha comprendido que las transformaciones digital y ecológica requieren de colaboración público privada, con las empresas necesitando del sector público y el sector público, de las empresas.
Sánchez se compromete a amarrar el déficit
La buena marcha de la economía en la actualidad, a pesar de los síntomas de ralentización, ha sido uno de los hilos conductores del discurso del presidente, oponiéndolo al momento en que se puso en marcha la asociación, en plena crisis financiera. «Nuestro país recuperó en un año las cifras de empleo previas a la pandemia de COVID-19. Durante la crisis financiera, tardamos diez años. Si pensamos en términos de PIB, fue a principios del año 2022. Durante la crisis financiera se tardaron ocho años», ha subrayado el presidente.
Sánchez ha agradecido la apuesta de las multinacionales por España, con unas cifras de inversión extranjera directa en nuestro país que no se habían visto antes. En este sentido, el presidente se ha comprometido a mejorar la formación en el mercado laboral como una de las cuestiones clave para mejorar la productividad de la economía de nuestro país, al tiempo que ha prometido trabajar para paliar los efectos de la inflación en familias y empresas. También ha apostado por una consolidación fiscal, llevando el déficit al 3% del PIB el año que viene y la ratio de deuda pública sobre PIB hasta el 106%.
El presidente ha asegurado que su Gobierno ofrece «certidumbre» y «confianza» y que va a mantener una política económica que, a su juicio, ha dado buenos resultados. «El esfuerzo que estamos haciendo en un contexto tan difícil me parece formidable. No solamente es consecuencia del trabajo de la Administración pública, también el de la comunidad empresarial y también de las multinacionales», ha glosado.