Sánchez tapa las explicaciones sobre el concierto catalán con una nueva polémica en el BdE

Tapar el ruido con más ruido. Esa es la estrategia que La Moncloa ha diseñado para el arranque del curso político, concentrando en una misma jornada una conferencia inaugural del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con las explicaciones sobre el concierto catalán de la titular de Hacienda y el potencial nombramiento de un ministro como nuevo gobernador del Banco de España.

Sánchez reunirá en el Instituto Cervantes a más de 150 agentes sociales del país, ante los que dará pistoletazo de salida al nuevo año en La Moncloa y previsiblemente anunciará a la persona a la que designa al frente del supervisor bancario. El potencial nombramiento de José Luis Escrivá, responsable de la cartera para la Transformación Digital, podría suponer un terremoto político en cualquier otro momento.

Pero el salto de un ministro en activo a una institución independiente puede ser menos lesivo para los intereses del Gobierno de Sánchez que el otro asunto que puede romper las costuras del socialismo: la financiación singular para Cataluña.

Sánchez contraprograma a Montero y el concierto catalán

La conferencia inaugural de Sánchez tendrá lugar al mismo tiempo que comienza el pleno extraordinario en el Senado donde la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, tendrá que dar explicaciones «sobre el secesionismo fiscal que ha acordado con sus socios de forma bilateral y fuera del sistema de financiación de comunidades autónomas de régimen común».

Serán las primeras explicaciones de la ‘número dos’ de Sánchez en el Gobierno y en el partido de un asunto espinoso. Por un lado, porque puede levantar en armas a los barones socialistas, si se confirma el agravio por beneficiar a Cataluña. Por otro, porque cualquier salida del guion puede provocar el enfado de los independentistas de ERC, quienes hablan de un «concierto económico»… mientras que el Gobierno habla de «financiación singular».

La tarde estará protagonizada por el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, quien defenderá ante la Comisión del ramo en el Congreso de los Diputados al candidato del Gobierno para el Banco de España. El principal candidato es su compañero de gabinete, José Luis Escrivá, quien podría estar viviendo sus últimas horas como titular de la cartera para la Transformación Digital.

Ningún gobierno ha nombrado, hasta ahora, a un ministro en activo como nuevo gobernador de una institución que se presume independiente. El antecedente más parecido es el nombramiento de Miguel Ángel Fernández Ordóñez en 2006, ya que antes de ese cargo había sido secretario de Estado de Hacienda bajo el mandato de Pedro Solbes.

Aquella ocasión fue la primera en la que la tradición pactista entre PP y PSOE se rompió, con el Gobierno del socialista José Luis Rodríguez Zapatero designando a gobernador y subgobernador. La de la próxima cúpula del Banco de España podría ser la segunda. Una ‘bomba de humo’ que podría ser capaz de ocultar, en parte, los titulares de Montero sobre el ‘cupo catalán’.