Las pymes encadenan seis trimestres de pérdida de productividad: cayó un 2,3% hasta junio
Cepyme urge al Gobierno a tener en cuenta la situación de la pyme de cara a tomar medidas que puedan agravar aún más su productividad
Las pequeñas y medianas empresas encadenan año y medio perdiendo productividad y, en el segundo trimestre de este año, la caída se situó en el 2,3%, lo que sitúa la referencia un 1,7% por debajo de los niveles que registraban antes de la pandemia, de acuerdo con un informe elaborado por la patronal Cepyme.
El Indicador Cepyme sobre la situación de la pyme, publicado este lunes, arroja que el volumen de ventas por empleado, la variable que utiliza la patronal para evaluar la productividad, se encuentra lastrado por un escenario de mayores costes laborales para las compañías, una financiación más cara, la morosidad y los incrementos del empleo superiores a la facturación.
Si la productividad cayó un 2,3% interanual en el conjunto de las pymes durante el segundo trimestre de este año, el descenso fue superior para las medianas empresas (-3,1%), mientras que fue más contenido en el caso de las pequeñas (-1,9%). El informe de la patronal que dirige Gerardo Cuerva hace notar que las compañías más pequeñas encadenan 18 meses de descenso en su productividad, frente a los 15 de las medianas.
En el lado positivo, las ventas de las pymes aumentaron un 4,9% en tasa interanual (5,2% en el caso de las pequeñas y 4,3% para las medianas), aunque en términos reales (descontada la inflación) el avance se reduce al 2,7%.
Del otro lado, el empleo aumentó un 2,9%, situando en 9,3 millones los asalariados al servicio de las pymes. Con tanto, hay un cierto agotamiento en el dinamismo de los puestos de trabajo en las empresas más pequeñas, donde avanzó un 1,9% hasta los 6,49 millones de trabajadores. En las medianas, el alza fue del 5,3%, hasta los 2,87 millones de empleados
«Este crecimiento del empleo, superior a las ventas, incrementa el coste laboral por unidad vendida y repercute negativamente en la productividad, especialmente en el caso de las empresas más pequeñas, así como en su capacidad de acometer nuevas inversiones o generar más empleo», advierte el informe de la patronal.
Los costes laborales siguen presionando al alza, con un 4,5% de avance en comparación con el segundo trimestre de 2023, tres décimas menos que entre enero y marzo. Los costes empresariales se mantienen en un entorno de estabilidad, dice Cepyme, debido a la tendencia descendente de los precios de la energía y productos intermedios, que acumulaban una notable subida en los últimos trimestres. Según los cálculos de la patronal, los costes operativos son un 18,3% superiores a la cifra del mismo periodo de 2021, en plena salida de la pandemia, y un 22% superiores a los de 2019.
Este incremento del 4,5% corresponde al aumento del 3,9% del salario medio ordinario y del 5,4% en el resto de los costes laborales, incluidas las cotizaciones sociales.
Aquí las pequeñas empresas sufren un mayor incremento de los costes (4,7%) que las de tamaño mediano (3,9%), hasta un acumulado del 23,1% y del 16,9%, respectivamente. Esta brecha acumulada es mayor para las pequeñas, explica Cepyme, por las subidas del salario mínimo interprofesional (SMI) de los últimos años, que han tenido un impacto mayor en las sociedades más pequeñas «porque su salario promedio, dada su menor productividad relativa, es también más bajo».
En cuanto al número de empresas, este sigue siendo un 0,4% inferior al nivel prepandemia. En términos absolutos, ahora hay 5.100 empresas pequeñas menos que en el segundo trimestre de 2019, y 2.700 compañías medianas más. Así, el saldo arroja 2.400 pymes con empleados menos que hace cinco años.
Además, si bien los costes de financiación se han desacelerado ligeramente este trimestre -un 4,81% de tipo de interés medio frente al 4,91% del precedente-, la referencia sigue siendo mayor a 2023 y 3,2 puntos por encima de la de 2022.