PwC rebaja las expectativas del Gobierno de cara a 2024: prevé que el PIB crezca un 1,6%
Las estimaciones de la consultora se sitúan cuatro décimas por debajo de las del Ejecutivo, que espera que la economía española crezca un 2% el próximo año
Los expertos de PwC han empeorado sus expectativas de cara a la evolución de la economía española el próximo año. La pérdida de ritmo de la demanda interna y de las exportaciones han alimentado el pesimismo de la consultora, que ahora prevé que el Producto Interior Bruto (PIB) ralentice su crecimiento hasta el 1,6%, lo que arroja un recorte de tres décimas respecto su previsión del mes de junio.
Así lo recoge el informe publicado por la compañía, que aglutina la opinión de un panel de 450 expertos, empresarios y directivos. Las estimaciones de la consultora contrastan con las previsiones del Gobierno, que estimó un crecimiento de la economía española del 2% para 2024 en el cuadro macroeconómico que remitió a la Comisión Europea junto al Plan Presupuestario.
A pesar de que la estimación de la consultora es más optimista que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que augura que la economía crezca un 1,4% el próximo año, es más pesimista que la del Banco de España, que apunta a un crecimiento del 1,8%, pero también que las del Fondo Monetario Internacional (FMI), la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) y la Comisión Europea (CE), quienes vaticinan que se situará en el 1,7%.
PwC prevé un crecimiento del PIB del 2,1% en 2023
Poniendo el acento en la previsión para este 2023, los expertos de PwC estiman un crecimiento del 2,1%, unas expectativas inferiores a las formuladas por el Gobierno, que esperan que el PIB se engrose un 2,4%. Tanto la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Comisión Europea esperan que la economía española evolucione en la línea de las expectativas del Ejecutivo.
Sin embargo, las previsiones del Banco de España y la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) muestran una mayor prudencia al estimar que el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) para el próximo año se sitúe en torno al 2,3%.
Deterioro del escenario económico
El informe también apunta hacia un deterioro de la coyuntura económica actual y de los próximos meses. Mientras que el número de encuestados que consideran que la situación actual es buena ha experimentado una caída de cerca de 20 puntos, al reducirse del 50,5% al 32,6%, la cantidad de participantes que la calificaría de regular se ha elevado una proporción casi idéntica hasta sobrepasar el 61%.
El principal motivo tras esta apreciación, para un 76,3% de los encuestados, es que la demanda esperada no será suficiente para elevar la producción, puesto que las familias van a moderar su consumo en los próximos seis meses, como prevé el 42,4% de los participantes. Con todo, el 74,7% de los expertos considera que el freno más significativo lo registrará la compra de vivienda.
A ojos de los empresarios, el «factor determinante» el próximo año no será otro que el impacto en la actividad el deterioro de los principales mercados exteriores en las exportaciones. En este sentido, el 53,1% los encuestados aseguran que la situación económica y financiera de las compañías es regular, a la vez que se ha elevado del 13,7% al 46,5% el número de empresarios que consideran que las perspectivas de los mercados exteriores son desfavorables.
Tal y como alerta el informe, estas valoraciones reflejan un desplazamiento de la opinión de los encuestados hacia posiciones menos optimistas que hace unos meses sobre la evolución de la inversión productiva, la exportación y la creación de empleo.