Prohibido tener gallinas en casa si no se realiza este importante trámite: multas de hasta 3.000 euros

En los últimos tiempos, el precio de los huevos ha aumentado de manera considerable, lo que ha llevado a muchos ciudadanos a optar por el autoconsumo como una alternativa para reducir sus gastos en la compra de este producto básico. Algunas personas han comenzado a tener gallinas en sus hogares, en patios, jardines o corrales, con la esperanza de producir sus propios huevos. Sin embargo, esta práctica, aunque permitida, está sujeta a una serie de trámites legales que deben cumplirse para evitar sanciones, que en algunos casos pueden alcanzar los 3.000 euros.

La normativa española establece que es posible tener gallinas en casa para consumo propio, pero hay ciertas condiciones a las que los propietarios deben atenerse para evitar incurrir en infracciones. El Real Decreto 637/2021, de 27 de julio, regula las condiciones de las granjas avícolas y establece las normas básicas para las explotaciones ganaderas, incluidas las destinadas al autoconsumo. Es importante destacar que, si no se cumplen los requisitos establecidos en esta ley, las personas que mantengan gallinas en sus casas pueden enfrentarse a multas económicas considerables.

Condiciones para que las gallinas se consideren para autoconsumo

Según el artículo 2.h del Real Decreto 637/2021, se considera una «explotación para autoconsumo» a aquellas que cumplan una serie de condiciones específicas. En primer lugar, debe tratarse de una explotación pequeña con un máximo de 0,15 Unidades de Ganado Mayor (UGMs), lo que equivale a una cantidad limitada de aves. Además, esta explotación no puede comercializar los productos obtenidos, como los huevos o la carne de las gallinas. De hacerlo, la explotación pasaría a ser considerada una explotación reducida, con obligaciones adicionales.

Es fundamental señalar que las gallinas para autoconsumo no pueden ser especies de aves corredoras, como los ratites, que incluyen aves como los emúes o avestruces. Estas últimas, si se criaran en casa, no podrían beneficiarse de las mismas exenciones que las gallinas comunes, y estarían sujetas a una normativa más estricta.

Trámites imprescindibles para poder tener gallinas en casa

El principal requisito para tener gallinas en casa es la comunicación previa con las autoridades. Según el artículo 16.5 del Real Decreto 637/2021, las personas interesadas en mantener gallinas para autoconsumo deben informar a las autoridades competentes para que su explotación sea incluida en el Registro General de Explotaciones Ganaderas. Este procedimiento garantiza que las personas que tienen gallinas en sus casas sean registradas y supervisadas adecuadamente.

Además, las gallinas deberán cumplir con ciertas condiciones higiénico-sanitarias y de bienestar animal. Los propietarios deben asegurarse de que las aves estén en un entorno adecuado y saludable, lo cual incluye la identificación de un veterinario de referencia para la atención en caso de que surjan problemas de salud. Además, los controles oficiales por parte de la autoridad competente serán necesarios para verificar que se cumple con las normas.

Es importante resaltar que, aunque las explotaciones para autoconsumo están exentas de cumplir con la mayoría de las regulaciones del Real Decreto, el cumplimiento de las condiciones básicas como el mantenimiento de un libro de registros de las aves es obligatorio.

Las gallinas deberán cumplir con ciertas condiciones higiénico-sanitarias y de bienestar animal

Sanciones por incumplir la normativa

El no cumplir con los trámites y condiciones establecidos para la tenencia de gallinas en casa puede acarrear importantes sanciones económicas. El artículo 21 del Real Decreto 637/2021 establece que el incumplimiento de las normativas, como no registrar las gallinas o no cumplir con las condiciones de bienestar animal, puede conllevar multas que van desde 600 hasta 3.000 euros. La gravedad de la sanción dependerá de la infracción cometida.

Las multas pueden derivarse de otras normativas relacionadas con la sanidad animal, la protección de los animales en las explotaciones o las regulaciones sobre la producción agroalimentaria. Específicamente, se hace referencia a leyes como la Ley 8/2003 de sanidad animal y la Ley 32/2007, que regula el bienestar animal, así como al Real Decreto 1945/1983, que establece las infracciones y sanciones en el ámbito agroalimentario.

Los propietarios de gallinas en casa deben asegurarse de cumplir con todos los trámites necesarios para evitar ser sancionados. No declarar la explotación y no registrar las gallinas puede ser considerado una infracción leve, pero aún así, las multas pueden ser bastante elevadas, especialmente para aquellos que no realicen los procedimientos de forma adecuada.

En resumen, tener gallinas en casa para autoconsumo de huevos está permitido, pero está sujeto a una serie de trámites y regulaciones establecidos en el Real Decreto 637/2021. Los propietarios deben asegurarse de registrar su explotación, cumplir con las normas de bienestar animal y mantener un control sanitario adecuado para evitar sanciones. Si no se cumplen estas condiciones, las multas pueden alcanzar los 3.000 euros.

La creciente demanda de autoconsumo como respuesta al aumento de precios en los supermercados ha llevado a muchas personas a considerar tener gallinas en sus hogares, pero es importante recordar que, como en cualquier otro tipo de actividad ganadera, deben cumplirse las normativas establecidas para garantizar la seguridad y el bienestar tanto de los animales como de las personas involucradas.