El precio de las casas crece en España seis veces más que en la zona euro tras la Ley de Vivienda de Sánchez

El precio de la vivienda creció en nuestro país un 7,9% hasta junio, comparado con 2023, mientras que en nuestros socios del euro subió un 1,3

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El Gobierno no termina de encontrar la tecla para atajar la crisis de la vivienda. Un año después de que entrara en vigor la Ley de Vivienda que diseñó el PSOE en coalición con Unidas Podemos, los precios avanzan en nuestro país al mayor ritmo entre las grandes economías de la Unión Europea: con datos del segundo trimestre de este año, el coste de una casa ya crece un 7,9%.

El encarecimiento de los hogares multiplica por seis la media de la zona euro (1,3%), que se encuentra arrastrada por los malos datos en dos de las principales economías: Alemania, donde los precios de la vivienda cayeron un 2,6% en comparación con hace un año; y Francia, donde la reducción fue del 4,6%.

El caso español es notable pero la 'excepción ibérica' en el precio de la vivienda también se aplica en Portugal, donde el precio ha acelerado en el segundo trimestre de este año tras una ligera desaceleración registrada a comienzos de 2024 (7%).

En España se trata del mayor avance desde 2022, antes de la invasión de Ucrania y cuando había muchísima liquidez en el mercado, y para ver tasas similares habría que retrotraerse a antes del estallido de la burbuja inmobiliaria. El precio se ha acelerado notablemente en el último año: en el tercer trimestre de 2023 avanzaba al 4,5%, cayó ligeramente al 4,3% a finales de año... y desde que arrancó 2024 se ha disparado: un 6,4% en el primer trimestre y el 7,9% entre marzo y junio.

Como evidenciaron los datos del INE, con datos del segundo trimestre, la vivienda nueva dispara su precio un 11,2%, la mayor tasa desde el tercer trimestre de 2007, cuando el mercado inmobiliario ya daba síntomas de estar a punto de reventar. La tasa de crecimiento de hace un año era del 7,7%. Pero es que la de vivienda de segunda mano también acelera a un ritmo del 7,3%, muy por encima del 2,9% al que avanzaba hace solo un año.

Estos datos coinciden con la entrada en vigor de la Ley de Vivienda, que fue una de las últimas normas que entraron en vigor después de que Sánchez adelantara las elecciones generales.

Este jueves se reunieron las comunidades autónomas con el Ministerio de Vivienda en un encuentro sectorial donde el Gobierno dio marcha atrás a una idea que había puesto encima de la mesa hace unos días: la de castigar con menor financiación a las regiones que no aplicaran todos los mecanismos de la Ley de Vivienda, como la declaración de zonas tensionadas. Ahora, el sentido es el contrario: mejorar los fondos de aquellas que sí lo aplican.

Una de las que ya ha avanzado que lo hará es el País Vasco. El consejero vasco de Vivienda, el socialista Denis Itxaso, ya ha anunciado que en los próximos meses declararán "zona tensionada" a las tres capitales de provincia -San Sebastián, Bilbao y Vitoria-, así como Irún (Guipúzcoa), Galdácano (Vizcaya), Zumaya (Guipúzcoa) y Lasarte-Oria (Guipúzcoa).

Según el nuevo gobierno socialista de la Generalitat, la aplicación de topes al alquiler en Cataluña ya ha contenido el alza de precios entre el 3% y el 5%.

"No es significativa, estamos hablando a lo mejor de un 3-5%, pero ya estamos viendo (los precios) hacia abajo", ha detallado la portavoz del Govern, Sílvia Paneque, que ha comunicado que darán a conocer la semana que viene los datos "con exactitud".

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