Oaktree presiona para ganar la puja por el suelo del Sabadell
El fondo Oaktree puja fuerte por Sdin Residencial, la promotora de Banc Sabadell, e intenta apartar a Cerberus y el resto de postores
La venta de Sdin Residencial, la promotora y los suelos en desarrollo de Banc Sabadell, ha despertado el apetito de los fondos, y uno de ellos está pujando con más fuerza que el resto. Oaktree, que ya partía como favorito por su joint venture con el banco catalán, quiere ganar la guerra y está dando más batalla que el resto, en todos los sentidos. Y eso que la puja todavía no se encuentra en fase de ofertas vinculantes.
Fuentes financieras explican Economía Digital que el fondo estadounidense está presionando para echar a Cerberus y el resto de ponentes de la contienda, o para que no jueguen con todo. Oaktree está apareciendo cada vez más como favorita, y no es casualidad, ya que está filtrando que el resto de fondos que van a pujar no pueden llegar a las mismas cotas. Se espera que las ofertas superen los 1.000 millones de euros.
Lo cierto es que la firma estadounidense es la más interesada, ya que firmó hace menos de un año un acuerdo con el Sabadell para desarrollar suelo conjuntamente. Por tanto, la compra le interesa por un lado porque Sdin Residencial —la antigua Solvia Desarrollos Inmobiliarios— supone más de lo que quería: suelo. Por el otro, porque si pierde la puja, tendrá que negociar con otro socio con el que pueda que no tenga la misma sintonía.
Oaktree quiere preservar la ‘joint venture’ con el Sabadell, pero el banco venderá su promotora al mejor postor
Sin embargo, esta relación no excluye al resto ni condiciona al Sabadell, que venderá la promotora, que ocupa a una plantilla de 80 personas, al mejor postor. Cerberus también se ha interesado y es uno de los fondos más activos en el sector inmobiliario en España. Precisamente por ello, cada vez que un banco vende un paquete de activos, suele aparecer como uno de los favoritos. Las fuentes consultadas apuntan que ahora no es distinto.
La venta de Sdin Residencial se encuentra todavía en fase de ofertas no vinculantes, y está previsto que en mayo se presenten las formales. En la actual fase, el banco que preside Josep Oliu ha recibido unas 20 muestras de interés, si bien no todas se materializarán en una propuesta en firme. De hecho, pese a que el Sabadell abrió la puja hasta a promotoras, como Neinor y Aedas Home, parece que el pastel es demasiado grande para ellas.
La batalla estará entre grandes fondos, entre los que destacan Oaktree, Cerberus y Goldman Sachs, que pueden llegar a lo que anhela el banco español: más de 1.000 millones de euros. El Sabadell necesita esta desinversión, además de para olvidarse de gestionar suelo y centrarse en su actividad, para reforzar su capital y ahorrarse tener que ampliar capital, como quieren algunos fondos, tal como explicó este medio.
El suelo del Sabadell… y de Oaktree
La relación del Sabadell con Oaktree se remonta al verano del año pasado, cuando firmaron un acuerdo para promover viviendas en España de forma conjunta. El banco aportaba el suelo y el know how, es decir, la gestión a través de Solvia Desarrollos Inmobiliarios. El fondo ponía el capital para alzar las promociones.
La joint venture no abarca todos los activos de Sdin sino que mayoritariamente es para desarrollar unos suelos comprados a Iberdrola Inmobiliaria. Se trata de terrenos en varios municipios de Madrid, Salamanca, Pamplona, Santander, Murcia y Valencia.
En total, Sdin Residencial tiene unas 15.000 viviendas proyectadas o ya en construcción. Casi la mitad, unas 7.000 viviendas en 140 promociones, se encuentran en lo que el Sabadell denomina zona noreste, principalmente Cataluña. Otras 3.500 más están en la zona centro, básicamente Madrid, 3.000 más en el sur de la península, mayoritariamente Andalucía, y 1.500 más en la Comunidad Valenciana y Murcia.
El valor en libros de estos activos para el Sabadell son 1.303 millones de euros. Sin embargo, un primer cálculo encargado a Savills Aguirre Newman, excluyendo algunos solares, lo dejó ya en 1.200 millones. Ese sería el objetivo ideal para el banco, pero como en estos procesos suele haber descuentos, superar los 1.000 millones tendría ya el visto bueno de la entidad.