Montero está dispuesta a dialogar con el PP para reformar el sistema de financiación autonómica
La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda aboga por un debate honesto y racional en un contexto político crispado
La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, manifestó este jueves que estaría dispuesta a sentarse «mañana» con el PP para llegar a un acuerdo y reformar el sistema de financiación autonómica, al tiempo que instó a «ser capaces de acompañar el debate siendo conscientes de que todos tenemos que renunciar para que el conjunto del sistema pueda avanzar».
Así lo dijo en su comparecencia en el Senado para exponer las líneas estratégicas de su Ministerio para esta legislatura, donde reconoció que la reforma del modelo de financiación se enmarca en un «contexto político muy crispado».
Montero hizo un «llamamiento sincero» al PP para abordar el debate de la reforma del modelo de financiación autonómica «con honestidad y desde el punto de vista racional». «Sé que es difícil y complejo», reconoció, tras asegurar que se sentaría «mañana» con los ‘populares’ «para ver la posición común que podemos adoptar».
Asimismo, pidió «ser capaces de acompañar el debate siendo conscientes de que todos tenemos que renunciar para que el conjunto del sistema pueda avanzar», y añadió en que para que la reforma del modelo de financiación pueda ser aprobada por las Cortes es «imprescindible tener posiciones desde los diferentes grupos políticos y no basta con que cada territorio diga la posición que tiene». Así, reclamó al PP tener una postura común, ya que «el sistema de financiación autonómica se modifica por ley orgánica y ello requiere una votación de los partidos».
Quita de deuda
La titular de Hacienda esperó que las «reuniones técnicas» con las comunidades autónomas empiecen «cuanto antes» para abordar la financiación autonómica y la posibilidad de condonar deuda. A finales de enero, Montero anunció en el Congreso que en febrero empezarían las reuniones entre Hacienda y las regiones para tratar dicha cuestión.
También defendió que la condonación de deuda es «una propuesta seria y sensata que se va a compartir por las comunidades», ya que «la medida no afectará al endeudamiento global de país».
«El efecto es neutro en términos de deuda pública», indicó, tras criticar que las comunidades «se vieron obligadas a acudir al endeudamiento por la falta de recursos que se provocó al inicio de la anterior crisis». «No se dotó a las comunidades autónomas de los recursos suficientes para la provisión de los servicios públicos fundamentales», remachó.
Montero se comprometió a que el debate sobre la financiación local «irá de la mano de la reforma de la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local», ya que «los ayuntamientos siempre que se habla de la reforma del sistema de financiación autonómica reclaman que en paralelo se haga una reforma del sistema de financiación local» y, «por tanto, serán ambas reformas las que discurran en paralelo».