Menos intereses y una mayor contratación: así serán las hipotecas en 2025

Las hipotecas se tratan de un préstamo que se otorga para adquirir bienes inmuebles, como una casa, local, garaje o terreno. Este tipo de préstamo son ofrecidos por entidades financieras y está garantizado por el propio inmueble que se compra. Esto significa que, si el usuario no cumple con los pagos establecidos, el banco tiene el derecho legal de reclamar la propiedad como pago de la deuda.

El funcionamiento de una hipoteca se basa en un acuerdo entre el prestatario (quien recibe el préstamo) y el prestamista (quien lo otorga). El primer paso es que el interesado en adquirir un inmueble solicite la hipoteca. El banco evaluará la capacidad de pago del solicitante, considerando factores como sus ingresos, historial crediticio y deudas actuales.

Después, el banco suele financiar un porcentaje del valor del inmueble, generalmente entre el 70% y el 90%. El comprador debe aportar el resto como un pago inicial y se devuelve el préstamo en cuotas mensuales que incluyen el dinero prestado y los intereses, que son establecidos por índices como el euríbor. Los intereses pueden ser fijos o variables, y el plazo para pagar una hipoteca suele ser de 15 a 30 años.

El Euribor es un índice de referencia utilizado principalmente en Europa para calcular los intereses de ciertos productos financieros, especialmente préstamos hipotecarios a tipo variable. Representa la tasa promedio a la que los principales bancos europeos se prestan dinero entre sí en el mercado interbancario. De cara a 2025, habrá algunos cambios en las hipotecas.

Cómo serán las hipotecas en 2025

Las hipotecas ya se preparan para 2025 con importantes cambios. Según HelpMyCash, los movimientos del Banco Central Europeo (BCE) serán clave en la evolución de los precios hipotecarios. La previsión es que el BCE mantenga su política de recortes de tipos de interés iniciada en 2024, con el objetivo que continúe la estabilidad de la inflación, ya cercana al 2%, y reactivar la economía en varios países de la eurozona.

El euríbor ya ha mostrado una tendencia a la baja en los últimos meses y se espera que este índice se sitúe entre el 2% y el 2,25% a mediados de 2025, lo que se traducirá en una reducción de las cuotas hipotecarias para quienes revisen sus préstamos este año.

Con un entorno de financiación más favorable, los bancos también están ajustando sus ofertas para atraer a nuevos clientes. Según HelpMyCash, las hipotecas fijas, las preferidas por los compradores españoles, podrían alcanzar intereses por debajo del 2,25% en la primera mitad de 2025.

De hecho algunos bancos ya han comenzado a rebajar sus ofertas este diciembre. Entre las más destacadas se encuentra la Hipoteca Fija que ofrece Sabadell, cuyo interés ha bajado al 2,50%, el más competitivo del mercado, siempre que el cliente cumpla con ciertas condiciones de vinculación. Otras entidades como Bankinter y COINC han reducido sus tipos al 2,69%.

La vivienda seguirá subiendo

Aunque las hipotecas van a ser más baratas, el precio de la vivienda continuará subiendo debido a la poca oferta en comparación con la demanda impulsada por estos préstamos más accesibles. Para compensar, los bancos podrían flexibilizar sus condiciones y financiar más del 80% del valor de las propiedades a solicitantes con buen perfil financiero, facilitando el acceso a quienes dispongan de menores ahorros para la entrada inicial.

En resumen, 2025 promete ser un año de oportunidades para quienes buscan comprar una vivienda, aunque será especialmente complicado en las zonas más tensionadas, como pueden ser las principales ciudades (Madrid, Málaga, Barcelona, Sevilla o Valencia). Muchas personas están tomando diferentes caminos, comprando viviendas en zonas más alejadas.