La subida de costes laborales ahoga a la pyme: encadenan nueve trimestres por encima del 5%
Un estudio de la patronal Cepyme apunta que la productividad de la pequeña empresa sigue por debajo de niveles de hace una década, presionada por los incrementos salariales
Los costes laborales de las pequeñas y medianas empresas encadenan ya nueve trimestres avanzando a ritmos superiores al 5%, una cadencia que no coincide con la de su productividad: en el tercer trimestre de 2023 se redujo un 0,9% y aún sigue más de cuatro puntos por debajo de la registrada en 2011.
Así lo evidencia el Indicador Cepyme de la situación de las pymes publicado este lunes, que recoge un descenso por tercer trimestre consecutivo de la productividad en compañías inferiores a los 50 empleados, un indicador que aún no ha recuperado los niveles prepandemia (sigue siendo un punto inferior a 2019). Por contra, los costes laborales recogen la mayor racha alcista desde 1994, avanzando un 5,2% en el caso de las pequeñas empresas y un 5,6% en el de las medianas.
La moderación de la inflación ha permitido, eso sí, un recorte en los costes totales de las pymes, que descendieron por segunda vez consecutiva, aunque siguen un 15,9% por encima de los niveles de hace dos años.
El empleo en la pyme sigue creciendo, pese al aumento de costes
Las pymes llevan tiempo denunciando que, entre otros factores, la subida de las cotizaciones (este mismo mes se incrementó la aportación del Mecanismo de Equidad Intergeneracional) o los incrementos del salario mínimo interprofesional (SMI, que se ha revalorizado en un 5% este año, hasta los 1.134 euros por paga) están lastrando los resultados de la base del tejido productivo española, ya que el grueso (más del 99%) de las compañías son de tamaño reducido.
En un comunicado, la patronal «desaconseja» que se siga por la senda de estos incrementos de los costes laborales, a los que se podría sumar, aunque de manera «indirecta», dicen, el potencial recorte de la jornada manteniendo el salario, lo que, de facto, implicaría un alza de los sueldos, al remunerarse en mayor cuantía cada hora trabajada.
«La intervención de los costes laborales a través de un SMI que afecta a toda la escala salarial, la subida continua de cotizaciones, la prórroga del veto a los despidos o el previsto descenso de la jornada laboral se suman a factores externos a los que se enfrenta la empresa española, como el encarecimiento del crédito o el impacto en los suministros de crisis como la del Mar Rojo«, denuncian desde la organización que preside Gerardo Cuerva.
Las ventas se estancan: apenas avanzan un 0,9%
Mientras, la patronal de las pymes detalla que el volumen de ventas deflactado (es decir, ajustado por la inflación) apenas ha avanzado un 0,9% en el tercer trimestre de 2023, un «débil crecimiento» en comparación con el mismo periodo del año anterior. Si tomamos como referencia el tercer trimestre del último año antes del golpe del COVID-19, el incremento es de solo el 1,8%.
Con todo, las pequeñas y medianas empresas siguen siendo las grandes creadoras de empleo: el número de asalariados aumentó un 2,6% entre julio y septiembre del año pasado y sigue, por segundo trimestre consecutivo, aportando 9 millones de ocupados al mercado laboral. Desagregado por el tamaño, las medianas crearon más puestos de trabajo (un 3,6%, hasta los 2,7 millones de empleados) que las pequeñas, donde fue el avance fue más modesto (2,2%, hasta los 6,3 millones).
¿Seguirá ese ritmo a futuro? Está por ver, toda vez que la influencia de la subida del SMI puede afectar a las cuentas de muchas compañías. Según la propia patronal, situar el SMI en los 1.134 euros por paga lo colocará por encima del 75% del salario medio de las pequeñas y medianas empresas en 27 provincias, más de la mitad. A saber: Cádiz (82,6%), Córdoba (79,7%), Granada (78,1%), Huelva (74,7%), Jaén (83,6%), Málaga (76,9%), Huesca (76,9%), Teruel (81,4%), Asturias (78,8%), Baleares (79%), Las Palmas (78,5%), Tenerife (79%), Cantabria (83,1%), Ávila (90,8%), León (84,4%), Salamanca (84,9%), Segovia (83,1%), Zamora (89,1%), Guadalajara (76,3%), Toledo (83,5%), Alicante (85,4%), Badajoz (87,3%), Cáceres (78,4%), Orense (75,3%), Pontevedra (77,9%), Murcia (86,7%) y La Rioja (83,3%).