La banca europea tiene pendiente una asignatura de diez billones
José Viñals, responsable de asuntos monetarios del FMI, conecta la alarma en las jornadas del CÃrculo de EconomÃa sobre la solvencia de varias entidades
La banca todavía está en cuidados intensivos, un ejemplo claro es el Popular. A pesar de su lenta mejoría, una parte de ella aun está en riesgo, y el Fondo Monetario Internacional (FMI) hace sonar la alarma: casi uno de cada tres activos financieros de la zona del euro está en manos de entidades con «serios problemas». Los activos en riesgo alcanzan los diez billones de euros.
El consejero y director de asuntos monetarios y mercado capitales del FMI, José Viñals, alertó este viernes de que «en la zona del euro hay un 30% de los activos financieros en manos de bancos que tienen ajustes muy difíciles pendientes». «Este es un problema muy importante», ha insistido en la reunión anual del Círculo de Economía en Sitges.
A pesar de iniciar su repaso al sistema financiero asegurando que está mejor que hace unos años, lo identificó como una de las vulnerabilidades de la economía mundial. Viñals explicó que, en las economías avanzadas –no sólo la del euro–, el 60% de la banca está sana, pero el resto tiene problemas de diversa intensidad.
El 25% de las entidades «tiene deberes pendientes» para terminar de salir a la superficie, mientras el 15% restante «está en serios problemas». «Por eso nos preguntamos dónde estaban los reguladores», añadió.
EEUU resiste mejor
Dentro de las economías avanzadas, la del euro está en peor situación que la estadounidense, y la banca en serios problemas alcanza en los países con la moneda única europea el 30% de los activos financieros, lo que ha cifrado en diez billones de euros.
El consejero del FMI usó una metáfora futbolística para explicar la situación en la que se encuentran estas entidades: «La competencia hace que sea como jugar la final de la Champions contra equipos de 100 jugadores, y no pueden jugar, no son rentables».
Por ello, ha hecho un llamamiento a la concentración del sector financiero, para que quede en manos de menos bancos y más solventes.
Riesgo de estancamiento
El FMI cree que la salida de la crisis es definitiva, y que no hay riesgo de volver a caer en una recisión a nivel global. No obstante, advierte del riesgo de estancamiento del crecimiento si no se hacen las políticas adecuadas.
«El problema que hay actualmente es que la confianza no es todavía suficientemente sólida, lo que incide en que la economía y la situación financiera no terminen de recuperarse», dijo. Si no se hacen las políticas para un crecimiento sostenible, se corre el riesgo de que la desconfianza de los ciudadanos crezca todavía más.
Viñals reconoció que la situación política en algunos países también supone una amenaza. Por ejemplo, el referéndum en el Reino Unido, «el calendario electoral que se avecina en España» y los conflictos internacionales y el terrorismo.