Un trabajador medio paga más de 3.800 euros de IRPF cada año
Un estudio precisa que el IRPF se lleva casi el 10% de sus ingresos anuales, sin tener en cuenta otras aportaciones como las cotizaciones salariales
El Instituto Juan de Mariana ha calculado que, para una renta salarial media de 34.989 euros anuales, se deben deducir 8.157 euros en cotizaciones a cargo de la empresa, 1.731 euros en contribuciones a nombre del trabajador, así como 3.860 euros en IRPF y 1.450 euros en gastos acumulados por IVA.
Con el inicio de la Campaña de la Renta 2023, el Instituto Juan de Mariana ha presentado el miércoles el ‘Impuestómetro’, un estudio que analiza la carga tributaria sobre la renta de los contribuyentes españoles.
La presión fiscal del Gobierno
Según las estimaciones de este Instituto, la carga de impuestos sobre el Producto Interior Bruto (PIB) español ha aumentado del 32% al 38% desde 1995, con el 60% de este incremento ocurriendo durante el Gobierno de Pedro Sánchez en los últimos 30 años.
Aunque España se encuentra ligeramente por debajo del promedio de la Unión Europea, con una diferencia de aproximadamente 3 puntos de PIB (40,9 por ciento del PIB en la UE-27), ocupa el puesto número 12 en el ranking de presión fiscal.
Sin embargo, el Instituto destaca que una menor presión fiscal no implica necesariamente menores impuestos en el país, ya que esta métrica solo proporciona una comparación inicial de la estructura fiscal entre los Estados Miembros.
Más impuestos sobre el capital y el trabajo
Según el Instituto, España grava más el capital y el trabajo (los impuestos pagados por los empleadores) en comparación con el resto de la Unión Europea. La mayor parte de la diferencia de recaudación con respecto al promedio de la UE se debe a que el país recauda menos impuestos al consumo y los trabajadores soportan una carga impositiva menor que sus homólogos europeos.
Según sus estimaciones, el costo de «armonizar» la presión fiscal de España con el promedio de la Unión Europea sería un aumento de 39.000 millones de euros en impuestos. Esto significaría que, en promedio, cada hogar tendría que pagar 2.082 euros adicionales en impuestos.
815 euros menos si las balanzas se equilibraran
Como ejemplo comparativo, la presión fiscal en Alemania es un 10% mayor que en España, sin embargo, los ingresos de los alemanes son un 45% más altos. «Esto subraya la importancia de relacionar la carga tributaria con los niveles de ingresos de cada país», enfatiza el estudio.
De hecho, si se ajustara el peso de los impuestos sobre el PIB para que coincidiera con los niveles de ingresos observados en España, la carga fiscal se reduciría en 15.000 millones de euros y las familias pagarían 815 euros menos cada año.