La inflación en la eurozona cae al 2,4%, el nivel más bajo en dos años
España, con una inflación interanual del 3,2%, se encuentra a ocho décimas por encima de la media europea
El Banco Central Europeo está cada vez más cerca de su objetivo de reducir la inflación en la eurozona hasta el 2%: según las estadísticas de Eurostat, los precios al consumidor en los países comunitarios han subido el 2,4% en noviembre.
Con este nuevo registro, la tasa de inflación se sitúa en su nivel más bajo desde julio de 2021, cuando el aumento de precios fue del 2,2 %, y lejos del máximo del 10,6 % que llegó a tocar en octubre del año pasado, según la estimación preliminar publicada este jueves por la oficina de estadística comunitaria.
España, por encima de la media europea
Por su parte, España registró una tasa de inflación superior a la media, del 3,2 % según el índice armonizado de Eurostat, en un mes en el que las tasas más elevadas se dieron en Eslovaquia (6,9 %) y Croacia (5,5 %), mientras que las más bajas se dieron en Bélgica, que vio caer los precios (-0,7 %), e Italia donde subieron solo un 0,7 %.
La inflación subyacente en la eurozona -que excluye el efecto de los precios de energía y alimentos por ser los más volátiles- también cayó seis décimas en noviembre, hasta el 3,6 %.
Las razones de la menor inflación
La caída de la inflación se explica por la moderación del aumento interanual de los precios en todos los componentes de la cesta de la compra: los de alimentos, alcohol y tabaco crecieron un 6,9 %, medio punto menos que en octubre, y representaron la mayor contribución a la tasa, seguidos de los servicios, que registraron una inflación del 4 %, seis décimas menos.
También fue seis décimas inferior a octubre el incremento de los precios de los bienes energéticos no industriales (2,9 % comparado con el 3,5 % anterior), en tanto que los precios de la energía aceleraron su descenso hasta el 11,5 %, frente a la bajada del 11,2 % el mes previo.
Lagarde: “Es pronto para cantar victoria”
El descenso de este indicador, que sirve de referencia principal para la política monetaria del BCE, acompañado de la caída de la tasa general hacia cotas próximas al objetivo del 2 % asociado con la estabilidad de precios, da argumentos a quienes abogan por que el emisor de la eurozona empiece a revertir las subidas de tipos de interés con las que ha combatido el aumento de la inflación en los últimos meses.
La presidenta de la institución, Christine Lagarde, defendió el lunes ante la Eurocámara que esta estrategia, que le ha llevado a incrementar los tipos en 4,5 puntos en el último año y medio, está funcionando para contener la subida de precios, pero insistió en que «es demasiado pronto para cantar victoria».
Auguró, de hecho, que si bien las presiones inflacionistas seguirán suavizándose, es posible que se produzca un «ligero» repunte de la tasa general de inflación en los próximos meses por efectos de base y subrayó que la perspectiva a medio plazo «sigue rodeada de una considerable incertidumbre».
Qué pasará con los tipos de interés
En este contexto, dijo que el BCE espera que mantener los tipos de interés en los niveles actuales por una duración «suficientemente larga» contribuirá «sustancialmente» a restaurar la estabilidad de precios y reiteró que estos seguirán en niveles «suficientemente restrictivos por tanto tiempo como sea necesario».
Pese al descenso de la inflación general, las tasas divergen entre los veinte socios de la eurozona, donde la mitad de los Estados superan el 2,4 % de media y el resto está por debajo.
Además de las mencionadas Eslovaquia (6,9 %), Croacia (5,5 %) y España (3,2 %), se sitúan por encima de esta cota Austria (4,9 %), Eslovenia (4,5 %), Estonia (4,1 %), Francia y Malta (ambas 3,8 %), Grecia (3 %) y Chipre (2,5 %).
Por debajo están Bélgica (-0,7 %), Italia (0,7 %), Finlandia (0,8 %), Letonia (1,1 %), Países Bajos (1,4 %), Luxemburgo (2,1 %), Portugal, Alemania, Irlanda y Lituania (todas 2,3 %), según los datos de Eurostat.