Sánchez acelera el perdón de 15.000 millones a Cataluña para atar los Presupuestos

El Gobierno trabaja en el compromiso de investidura con el objetivo de negociar la ley junto a las Cuentas Públicas

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, durante una sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, a 11 de diciembre de 2024, en Madrid (España). El PP encara la sesión de control al Gobierno de hoy en el Congreso como un nuevo examen al Ejecutivo sobre la corrupción, que volverá a centrar las preguntas del primer partido de la oposición esta vez tras las nuevas revelaciones del empresario Víctor de Aldama, presunto conseguidor de la trama Koldo, que ha señalado a varios miembros del Ejecutivo. Fernando Sánchez / Europa Press 11 DICIEMBRE 2024;GOBIERNO;PLENO;CONGRESO;CORRUPCION 11/12/2024

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

Las carpetas se acumulan en el Ministerio de Hacienda pero la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, confía en ir sacando uno tras otro todos sus temas pendientes en las próximas semanas y meses, con el objetivo de tener unos Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2025 en el primer trimestre del año próximo, aunque sea con una prórroga ‘técnica’ de las cuentas de 2023.

Montero, que se encuentra en plenas negociaciones para sacar adelante la reforma fiscal y hacer permanente el impuesto a las energéticas, entre otros asuntos, no ha dejado atrás el compromiso con ERC que permitió la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno: la condonación de parte de la deuda pública de las comunidades autónomas por parte del Estado. Una cifra que, en el caso de Cataluña, supone un alivio de 15.000 millones de euros.

Fuentes gubernamentales detallaron que esta promesa «no está paralizada» y que el Ejecutivo continúa haciendo los números necesarios para sacarla adelante. El Ministerio de Hacienda se comprometió a hacerlo mediante una ley que contenga una fórmula que beneficie a todas las comunidades autónomas que quieran acudir a esa asunción de la deuda pública.

De hecho, la propia vicepresidenta tenía previsto mantener una serie de reuniones con las comunidades autónomas para concluir ese mecanismo que convenciera a todas y que supusiera la condonación por parte del Estado de parte de la deuda pública contraída por los Ejecutivos regionales durante la crisis financiera, ya que acusan al Gobierno que entonces lideraba Mariano Rajoy de no haber puesto sobre la mesa recursos suficientes para evitarlo.

Sin embargo, la ronda de reuniones del presidente del Gobierno con los líderes autonómicos, que concluyó hace solo unas semanas con la única ausencia de la madrileña Isabel Díaz Ayuso, dejó en pausa esos encuentros.

Estas mismas fuentes gubernamentales apuntaron que el deseo en los pasillos del Ministerio de Hacienda es que la tramitación de este mecanismo «fuera en paralelo» con los PGE, aunque al mismo tiempo apelan al PP a entrar en la negociación, ya que la mayoría de los gobiernos regionales -y también las comunidades más endeudas- están gobernadas ahora mismo por los conservadores.

De hecho, la comunidad autónoma con unas cuentas en peor estado es la Comunitat Valenciana, con una deuda pública que ya roza los 60.000 millones de euros, y que aumentará previsiblemente por los efectos de la Dana del pasado 29 de octubre.

En este sentido, en el Gobierno desvinculan la potencial condonación de los alivios o ayudas a la región: «Valencia no va a estar desatendida», defienden, señalando que el president Carlos Mazón es consciente de este hecho.

En el Ejecutivo hay confianza en que saldrán adelante los Presupuestos, aunque sea necesario negociarlos y pese a las advertencias de Junts de que no están por la labor de hablar de las cuentas.

El propio presidente Pedro Sánchez, durante una conversación informal con periodistas en la recepción navideña que organiza La Moncloa, se mostró convencido de que los nuevos Presupuestos, además de los fondos europeos que entrarán el próximo año (el Gobierno solicitará un quinto desembolso ampliado en las próximas semanas), permitirán un estímulo adicional a la economía.

Sobre Junts, el presidente abrió también la puerta a normalizar la relación con Carles Puigdemont después de la Ley de Amnistía, que se va a aplicar por completo en 2025 -subrayó-, incluso reuniéndose con él y con Oriol Junqueras si es reelegido como presidente de ERC. Si esa foto que podría desatascar los Presupuestos tiene que tomarse en Bruselas o ya en España, es otra cuestión.

Comenta el artículo
Álvaro Celorio

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

Deja una respuesta