El Gobierno asume que no será capaz de bajar el paro del 10% en 2025 y será el más alto de la UE
El Gobierno estima que la creación de empleo, de casi 900.000 puestos de trabajo en dos años, permitirá llegar a los 22 millones de ocupados, pero sin la rebaja del paro correspondiente
El Gobierno proyecta para este año y el que viene una fuerte creación de empleo que dejará el mercado laboral de nuestro país en 22 millones de ocupados, una cifra histórica tras alcanzar el pasado año los 21 millones de trabajadores, pero que no permitirá un recorte de la tasa de paro: en 2025 seguirá siendo del 10,7%.
Estas son las estimaciones del cuadro macroeconómico del Gobierno que envió a Bruselas y que ayer el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, detalló después del Consejo de Ministros. Sin embargo, la proyección que el Ejecutivo remitió a la Comisión Europea solo incluía las tasas de crecimiento y no los incrementos nominales.
Los técnicos de Cuerpo estiman que la creación de empleo será robusta este año: un 2,4% más de ocupados, lo que se traduce en 507.000 trabajadores más. Se trata de un retroceso con respecto a 2023, que fue un año espectacular en términos del mercado laboral, pero esta moderación será más acusada en 2025. El año que viene la proyección es que el empleo avance un 1,7%, lo que resultará en 368.000 puestos de trabajo.
En total, y tomando como referencia los 21,18 millones de ocupados que tuvo de media nuestro mercado de trabajo en 2023, según datos de la Encuesta de Población Activa, en 2025 la ocupación rebasará ligeramente los 22 millones de trabajadores. Casi tres millones más que antes de la pandemia.
Ahora bien, esta dinámica tan buena en términos de ocupación no lo será tanto en relación con la tasa de paro. Las previsiones de Economía señalan que este año caerá 0,9 puntos porcentuales en relación con 2023, hasta el 11,2%. Todo ello, a pesar del repunte que arrojó la EPA del primer trimestre, con un inicio de ejercicio peor de lo esperado. De cara a 2025, la tasa de paro pasará del 11,2% al 10,7%.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se fijó como objetivo conseguir el pleno empleo en esta legislatura, una tarea para la que mandató a su entonces vicepresidenta económica, Nadia Calviño. Fue una de sus principales promesas económicas y en el Ejecutivo apuntaron que esta cifra se situaría en torno al 8%, los mínimos históricos en tasa de paro que ha conseguido nuestro país en el último siglo.
Sin embargo, el sustituto de Calviño, mucho más prudente y menos dado a pisar fuera del tiesto, aseguró durante su comparecencia que iban a «avanzar» hacia el pleno empleo. Y no es lo mismo dirigirse hacia un objetivo que conseguirlo.
En cualquier caso, el ministro alabó el comportamiento del mercado de trabajo desde la reforma laboral que impulsó el Gobierno, que se ha convertido, señaló Cuerpo, en el «elemento que vertebra» el buen patrón de crecimiento, y que permitió que en España se crearan el año pasado el 40% de los puestos de trabajo a nivel de toda la Unión Europea.
Con todo, el mandato de Sánchez será difícil de cumplir, a ojos de los distintos observadores económicos. Las perspectivas de Economía para la tasa de empleo son muy positivas, en comparación con el resto. El Banco de España, en su último informe trimestral de proyecciones, anticipa que en 2024 la tasa de paro se situará en el 11,6% (cuatro décimas más que la previsión del Gobierno), en tanto que será del 11,5% en 2025 y del 11,3% en 2026. La explicación reside en los flujos migratorios, que explicarían buena parte de los incrementos de la población activa y ocupada, por lo que se crearían puestos de trabajo pero no se reduciría el desempleo.
La Comisión Europea, que actualiza este miércoles sus previsiones con el paquete de primavera, recientemente señaló que el paro seguirá bajando, pero igualmente a ritmos más pesimistas que las proyecciones de Cuerpo. En su informe de revisión en profundidad de las variables macroeconómicas de nuestro país, fechado en marzo, el Ejecutivo proyectaba una caída del paro al 11,6% en 2024 y al 11,1% en 2025. Es decir, cuatro décimas más que la previsión de Cuerpo, en ambos casos.