Las cinco peores estafas de los chiringuitos financieros
En algunas estafas, las víctimas no pueden ser indemnizadas por el engaño sufrido y pierden parte de su capital
En los últimos años, las estafas y fraudes financieros con fines económicos se han incrementados debido a las posibilidades que permiten las nuevas tecnologías y las redes sociales. Caer en la trampa, puede causar grandes perdidas económicas, por ello, como es mejor «prevenir que curar» es importante aprender a identificar estas estafas para evitarlas.
Más en detalle, el término de «chiringuito financiero» hace referencia a aquellas entidades que ofrecen y prestan servicios de inversión sin estar autorizadas para hacerlo, es decir, al margen de la legalidad. En este caso, la mayoría de las veces suelen ser estafadores y suelen utilizar los mismos canales comerciales que puede emplear una entidad legítima para hacer su estafa más creíble: teléfono, correo electrónica, páginas web, redes sociales, entre otros.
«La aparente prestación de tales servicios es solo una tapadera para apropiarse del capital de sus víctimas«, advierten desde la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Además, las víctimas no suelen tener las garantías de las que sí cumplen con las normas, como la cobertura de los Fondos de Garantía de Inversiones o de Depósitos y, por tanto, no pueden ser indemnizadas por el engaño sufrido.
«Lo más aconsejable es no confiar en ninguna entidad desconocida mientras no se haya podido verificar que está debidamente autorizada para prestar servicios de inversión», aconseja el suprevisor.
Las 5 peores estafas
Desde la CNMV han detallado las cinco peores estafas de los chiringuitos financieros y lanzando recomendaciones para evitarlas.
1. Suplantación de identidad
En el caso de suplantación de identidad, empresas no autorizadas utilizan datos identificativos de compañías autorizadas e inscritas en la CNMV o sus mimas URL con cambios casi imperceptibles para confundir al inversor dando una apariencia de legalidad.
Para evitar esta situación, la CNMV recomienda consultar los datos de la empresa oferente a través de su web: denominación social, marca comercial, dominio y dirección web, sede y dirección postal, y número de registro en el organismo supervisor
2. Servicio de cuentas de trading financiadas ligadas a cursos de formación
Existen determinadas páginas web que ofrecen un servicio que se denomina genéricamente cuentas de trading financiadas. Estas ofrecen la posibilidad de acceder a una cuenta de valores para realizar operaciones como comprar y vender acciones. Para ello, el usuario debe realizar un curso para formarse sobre los pasos a seguir en el trading.
Dicho curso exige el abono de una cantidad de dinero previa, en ocasiones de varios miles de euros, para poder asistir. Sin embargo, desde la CNMV alertan de que en muchas ocasiones estos cursos son fraudes. «Las víctimas pierden el dinero entregado para realizar el curso y nunca consiguen el acceso a la cuenta de trading financiada», aseguran.
3. Fraude del técnico informático
Habitualmente, los chiringuitos se suelen hacer pasar por técnicos informáticos de una plataforma de inversión o una empresa conocida y alertan de problemas en ordenadores, móviles u otros dispositivos. Entonces, para solucionar el supuesto problema, piden descargar un programa o app para conectarse al equipo en control remoto con la finalidad de robar cuentas bancarias, datos personales o hacer compras por Internet.
4. Actividad de recovery room
Las recovery room contactan con personas afectadas por chiringuitos financieros y les prometen recuperar del capital perdido o recomprar acciones o valores adquiridos a través de empresas no autorizadas.
En estos casos, suelen pedir un dinero por adelantado, a modo honorario como en las inmobiliarias, con el objetivo de que vuelvas a invertir dinero o, incluso, vender tus datos a otras empresas, haciéndote creer que te están solucionando el problema y que podrás recuperar lo perdido.
5. Fraudes relacionados con criptoactivos
En los últimos tiempos, los criptoactivos, incluyendo las criptomonedas o criptodivisas, han adquirido una gran relevancia en el mundo financiero y, en consecuencia, los fraudes relacionados con este tipo de productos digitales también han incrementado.
Existen numerosos criptoactivos falsos y estafas cuyo único objetivo es privarte de tu dinero haciendo creer que puedes conseguir ganancias exponenciales. Estos se anuncian a sus víctimas en redes sociales, mensajes de texto, correo electrónico, por teléfono y mediante anuncios que aparecen en páginas web y redes sociales.
Los estafadores utilizan diferentes técnicas, prometen increíbles ganancias y presionan a tomar decisiones rápidas con el objetivo de «no perder la oportunidad». La información suele ser poco clara y llena de tecnicismos sobre nuevas y complejas tecnologías para confundir al inversor.