Cinco años de ‘sanchismo’: España es el país de la UE con peores resultados económicos
El país se sitúa en la última posición dentro del Indicador de Gestión Económica (IGE), elaborado por el Instituto Juan de Mariana (IJM), en el que obtiene 92,6 puntos
España se ha entronizado como el país de la Unión Europea (UE) con peores resultados económicos en los últimos cinco años. Así lo reflejan los datos recogidos en el Indicador de Gestión Económica (IGE) elaborado por el Instituto Juan de Mariana (IJM), que mide el desempeño de los 27 países miembros de la Unión Europea entre 2019 y 2023.
Tras analizar la evolución del Producto Interior Bruto (PIB), pero también en otras categorías empleo, presión fiscal, poder adquisitivo y deuda pública, el informe posiciona a España en el último puesto del listado.
El análisis sitúa como principal culpable de estos resultados a las políticas impulsadas por el Gobierno de Pedro Sánchez.
Después de recalcar que a lo largo de su mandato la economía ha crecido «lentamente» y el empleo «apenas ha mejorado», el informe también remarca que la presión fiscal «se ha disparado con fuerza, el poder adquisitivo de las familias está cada vez más lejos de los niveles observados en el resto de Europa y la deuda pública ha crecido de forma significativa».
España obtiene la peor puntuación de la UE
Según pone de manifiesto el estudio, la presión fiscal y el poder adquisitivo son los indicadores en los que el país muestra un peor desempeño, al ocupar las posiciones número 26 dentro del listado conformado por los distintos miembros de la UE.
Mientras que la fluctuación de la deuda pública en el periodo analizado coloca a España en la posición 24, la evolución del PIB la lleva al lugar 22. Por último, en cuanto al comportamiento del mercado laboral, ocupa la posición 18.
Al agregar las distintas puntuaciones obtenidas en el indicador, subraya el informe, el país ha obtenido una calificación de 92,6 puntos, la más baja entre los países que forman parte del análisis.
Teniendo en cuenta que los resultados se presentan asignando una puntuación de 100 puntos a la nota promedio de los miembros de la UE, España se sitúa un 7,4% por debajo del promedio comunitario.
La deuda pública triplica la media europea
Entre 2019 y 2023, la presión fiscal en España ha registrado un incremento del 2,9% sobre el PIB, lo que comporta una subida del 35,4% al 38,3%.
El país ocupa el segundo lugar entre los países de la UE donde más han subido los impuestos. En contraposición, la media comunitaria ha registrado una subida de 0,1 puntos del PIB, con trece países miembros que han reducido su presión fiscal y otros siete que la han aumentado de forma «muy moderada».
El desempeño del país tampoco ha sido bueno atendiendo al poder adquisitivo de las familias españolas, según constata el estudio elaborado por el think tank español.
Después de que la renta per cápita en paridad de poder adquisitivo se haya desplomado un 5,5% a lo largo de los últimos cinco años en España, la brecha de renta que la separa de la media europea se ha ensanchado desde el 9% hasta el 14%.
El informe también pone el foco en la deuda pública sobre el PIB. Mientras que el promedio comunitario arroja un incremento del 3,3%, la escalada en el caso de España triplica esta cantidad al repuntar un 10,8%.
Tras enfatizar que la deuda pública se ha elevado en 165 millones de euros diarios, la entidad ha querido recordar que durante la legislatura presidida por Pedro Sánchez, por cada euro de aumento del PIB se han emitido dos euros de deuda pública.
En el transcurso del periodo analizado, el avance de la economía española ha sido de 2,3 puntos, una cifra que dista considerablemente de la media registrada por los socios comunitarios, que alcanza los 5,6 puntos.
El indicador en el que España muestra un mejor desempeño es en el empleo. No obstante, el instituto destaca que el recorte del paro en los últimos cinco años se explica por actuaciones como la «reclasificación» de los contratos fijos discontinuos. En este sentido, alerta que, al medir el paro efectivo, la caída del desempleo registrada en el país ha sido de un 1,4% en los años que abarca el informe.
Cinco años al frente del Gobierno
Pedro Sánchez llegó al poder en el año 2018, después de que prosperase la moción de censura contra el entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. A pesar de que inicialmente manifestó su intención de agotar la legislatura, Sánchez finalmente se vio obligado a convocar elecciones para la primavera de 2019, después de que no lograra los apoyos suficientes para materializar los presupuestos.
Al no lograr la investidura ninguno de los candidatos a liderar el Ejecutivo, continuó como Presidente en funciones hasta enero de 2020, cuando se volvieron a convocar elecciones y resultó investido después de acordar un gobierno de coalición con Unidas Podemos.
Mientras que en su primer mandato Sánchez impulsó medidas como la exhumación de la tumba del dictador Francisco Franco del Valle de los Caídos, la segunda legislatura estuvo marcada por el estallido de la crisis sanitaria originada por el coronavirus y la invasión rusa de Ucrania.
Durante su segunda etapa al frente del Gobierno, promovió iniciativas como la reforma laboral, la reforma de las pensiones o la subida del salario mínimo. También puso en marcha dos baterías de medidas para atenuar el impacto económico de la guerra y la inflación en los bolsillos de los españoles, con iniciativas como la bajada del IVA en algunos alimentos o ayudas al transporte público. A la vez, apostó por aplicar los impuestos extraordinarios a la banca y las energéticas.
En las elecciones generales celebradas el pasado verano los socialistas cosecharon 121 escaños frente a los 137 obtenidos por el PP. Tras el intento fallido de investidura del candidato popular, Alberto Núñez Feijóo, la geometría parlamentaria resultante de los comicios empujó al secretario general del PSOE a cerrar acuerdos de investidura con Sumar, ERC, Junts, EH Bildy, PNV, BNG y Coalición Canaria para ser reelegido presidente del Gobierno.
Los resultados obtenidos por el PSOE en los comicios autonómicos en Galicia el 18 de febrero, los primeros tras el pacto con las formaciones nacionalistas catalanas sobre la aprobación de una Ley de Amnistía, se han saldado con una debacle electoral para el partido en la región, tras obtener nueve diputados, los peores resultados de su historia. De esta manera, se ha situado como tercera fuerza política, tras el PP, que ha revalidado su mayoría absoluta con 40 escaños, y el BNG, que ha obtenido 25.
Si se remonta a las elecciones autonómicas y municipales celebradas el pasado mes de mayo, se vislumbra la pérdida de poder por parte del socialismo en algunas de las principales ciudades y regiones del país. Tras los comicios, el PSOE no logró mantenerse al frente de ayuntamientos como el de Sevilla o Valladolid, ni tampoco en los Ejecutivos regionales de Extremadura, Comunitat Valenciana o Aragón, entre otros.