El PIB español se juega 76.000 millones con el confinamiento
Los ejercicios teóricos sobre el impacto que la crisis puede tener en la economía de los distintos analistas ofrecen importantísimas diferencias
La atípica situación en la que se encuentra España por la pandemia del coronavirus está provocando que realizar hoy previsiones sobre lo que le puede deparar a la economía española este año se esté convirtiendo en un lanzamiento de una moneda al aire.
Este martes, tras el distinto calendario festivo entre comunidades autonómas, vuelven al trabajo todos los sectores que han tenido un permiso retribuido recuperable obligatorio en las últimas dos semanas; en la segunda parte de lo que vivieron un día antes Madrid, Andalucía, Galicia, Aragón, Asturias, Castilla y León, Región de Murcia y Extremadura, con la reactivación de la construcción y la industria, principalmente.
La puesta en marcha de una parte de la actividad económica parada ha creado suspicacias internas en el Gobierno (Unidas-Podemos parece poco convencido de la reactivación de ciertas actividades esta semana), en tanto que sí ha sido apoyada por algunos políticos del Partido Popular, como el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, que el domingo, en una entrevista en La Sexta, apoyaba la reactivación paulatina, para evitar que la emergencia económica fuera todavía más acusada de la que ya se registra.
De hecho, gran parte de las estimaciones que están haciendo los diferentes analistas relacionen el impacto en la economía con la duración de las medidas de confinamiento total y parón de la actividad. La duda, además, también están en el sector turístico cuya reactivación no solo depende de cómo evolucione la pandemia en España, sino también del ritmo en el que se puedan reabrir las fronteras. Todo apunta a que la temporada de verano, si no inexistente para el turismo extranjero, podría ser muy floja.
IESE, Goldman y la CEOE: mucho margen en el cálculo del impacto
Con este escenario, el IESE, Goldman Sachs o la CEOE, que son algunas de las instituciones que se han animado a adelantar previsiones sobre el alcance para el PIB español de la crisis sanitaria, ofrecen previsiones muy diferentes, donde la distancia entre las mejores y las peores alcanza los 76.000 millones en PIB (una contracción mínima del PIB en 2020 del 3,6% y máxima del 10%), que equivale a más de un 6% de la riqueza generada por España en 2019 (se estima que la economía superó los 1,24 billones de euros el año pasado).
Sin consenso sobre lo que pasaría en el mejor de los casos, en lo que sí coinciden los analistas es en que la caída de nuestra economía en el peor escenario pasa por una contracción del 10%. El IESE y Goldman Sachs apuestan por ese descenso; que en el caso de la escuela de negocios es el máximo posible de acuerdo con su modelo, que contempla que el confinamiento y, por tanto, la normalización económica no se produzca hasta finales de julio.
Por el contrario, el IESE también ofrece la previsión más optimista, al estimar un impacto mínimo del 3,90%.
La CEOE también opta por una escenario de máximos y mínimos y, en lo peor, es algo más optimista que el IESE, ya que limita el impacto al 9% del PIB. Por el contrario, tal vez porque su informe es posterior, como poco, anticipa que la caída de la economía española será del 5%. Como la escuela de negocios, vincula el golpe a la duración del cierre económico y el confinamiento.
En cuanto a Goldman, se ubica a medio camino entre el IESE y la CEOE y anticipa que el PIB español se contraerá un 9,7% y que el déficit alcanzará el 10%.