El Gobierno ya ha adjudicado el 99% de fondos UE tras el retraso de un año en recibir 10.000 millones

España ha adjudicado ya casi la totalidad de los fondos europeos Next Generation EU recibidos hasta la fecha, debido a la ralentización en la llegada de las transferencias desde hace un año, ya que el adelanto electoral dejó en el aire algunas de las reformas necesarias para sacar adelante el cuarto desembolso.

Hasta la fecha, España ha recibido algo más de 38.000 millones de transferencias de la Unión Europea, 38.080 millones, para ser exactos. Y de acuerdo con los últimos datos de la plataforma ELISA, que hace un análisis exhaustivo de las licitaciones vinculadas al Plan de Recuperación, ya se han resuelto convocatorias por un valor de 37.703 millones de euros.

Es decir: del total de fondos que ha recibido nuestro país, apenas quedan 377 por resolver, a la espera de que lleguen los 10.000 millones del cuarto pago, que lleva medio año atascado en Bruselas. Si hablamos de fondos asignados, ya se ha asignado prácticamente la totalidad de las transferencias de la primera pata del Plan de Recuperación, mientras que se han publicado convocatorias por un total de 65.138 millones.

Los fondos europeos marchan a buen ritmo en nuestro país, aunque es cierto que la llegada del ‘maná’ europeo ha echado el freno. A principios de año Bruselas transfirió una partida de algo más de 1.000 millones de euros, correspondiente a un adelanto del nuevo capítulo RePowerEU, y queda pendiente de resolverse la solicitud del cuarto pago, valorado en 10.000 millones de euros.

El año pasado deberían haber llegado 17.000 millones de euros procedentes de Bruselas, pero el adelanto de las elecciones generales dejó en el aire algunas de las reformas necesarias para cumplir con la Comisión. No fue hasta finales de año cuando el Gobierno aprobó a través de dos Reales Decretos-Ley las normas comprometidas, pero solo salió adelante una de ellas. Hace un par de semanas el Ejecutivo dio luz verde, de nuevo, a los cambios en el nivel asistencial por desempleo, la ley de Yolanda Díaz que había quedado en el tintero y que dejaba a España al albur de un pago parcial.

La Comisión dio dos meses adicionales para revisar que se cumplían los hitos asociados al cuarto pago del plan y el plazo terminó justo el 20 de mayo. No fue hasta el Consejo de Ministros del 21 de mayo cuando se dio luz verde a la norma, aunque fuentes de Economía -el principal interlocutor con Bruselas- señalaron que el mecanismo del Ejecutivo comunitario era lo suficientemente flexible como para saltarse ese ‘deadline’ sin que hubiera represalias.

Con todo, y a pesar de que el nuevo real decreto ha sido pactado con los sindicatos y da marcha atrás en la excusa que puso Podemos para tumbarlo en enero, el texto ha de pasar de nuevo por el Parlamento. Y como pronto, esto será a partir del 10 de junio, ya que en las semanas en las que se celebra una convocatoria electoral no se llama a los diputados a Pleno. La Comisión podría esperar a su efectiva convalidación para dar el ‘ok’ al desembolso, sin enfrentarse a la potencial inseguridad jurídica de que la reforma sea de nuevo rechazada.

Más allá del cuarto pago, el Gobierno tiene en mente solicitar este mismo año fondos europeos por un valor de 25.000 millones. Así, los Ministerios de Economía y Hacienda prevén que este año se pida el quinto desembolso, por un monto de 7.248 millones, y el sexto, por 18.428 millones. En total, 25.676 millones, que serán instrumentados en 15.380 millones en préstamos y 10.295 millones de euros en transferencias a fondo perdido.

«Si el año 2021 fue el del lanzamiento del Plan de Recuperación y durante los años 2022 y 2023 se ha alcanzado velocidad de crucero en la puesta en marcha de las reformas e inversiones del Plan, 2024 constituirá el año de máximo despliegue de las inversiones, pues muchas cuentan con un elevado grado de madurez y parte de ellas ya estarán finalizándose», detalló el Ejecutivo en un documento reciente enviado a Bruselas

En cuanto al quinto y al sexto pago, todavía hay reformas importantes que tienen que ser adoptadas por el Gobierno para recibir el plácet de Bruselas, en un contexto en el que cuentan con una frágil mayoría parlamentaria. Por ejemplo, para el quinto desembolso todavía ha de aprobarse la Ley de Familias, que decayó en tramitación parlamentaria por el adelanto electoral, y que ahora el Ministerio de Derechos Sociales ha recuperado. Para el sexto pago, la Ley de Industria es una de las claves. Y han pasado tres ministros por ese departamento sin que haya conseguido salir adelante.