El Gobierno privatizará la parte sana de CatalunyaCaixa y liquidará el resto
El ministerio de Economía informa a la Generalitat del troceo y avanza que consulta con Bruselas cómo aplicar el nuevo esquema sin más recursos públicos
El Gobierno ha avanzado a la Generalitat que estudiará con Bruselas un nuevo plan para la privatización de CatalunyaCaixa. El esquema final de trabajo, elaborado por la consultora N 1, se sostiene sobre una de las posibilidades que el Ministerio de Economía tenía sobre la mesa: el troceo de la antigua caja de ahorros y su venta por fases.
La propuesta original la lanzó la propia Comisión Europea en marzo del año pasado, como avanzó Economía Digital. El Gobierno, sin embargo, ha desechado la opción hasta hace pocas semanas. El cambio de criterio radica en las posibilidades ciertas de que la tercera subasta de la caja quede desierta.
El Ejecutivo español trasladó la semana pasada a Bruselas que sus intenciones pasan por separar la parte rentable y ofrecerla a los inversores privados. El resto permanecerá en manos del fondo público FROB hasta que se pueda liquidar sin impactar en más gasto público.
El Ejecutivo de Artur Mas (CiU) fue puesto al corriente de las intenciones en una reunión técnica celebrada este martes.
El negocio rentable
Las unidades menos dañadas son las de banca privada y minorista. Ambas actividades ofrecen ebitdas positivos. El resto están condenadas a la desaparición debido a la resistencia que presentan los posibles compradores para asumir la entidad con su perímetro original. Con la configuración actual, los compradores sostienen que el valor de CatalunyaCaixa es negativo.
A pesar de los cambios sustanciales en el proceso, el calendario permanece sin alteraciones significativas. La privatización se lanzará en el segundo semestre del año para que el nuevo dueño pueda recibir las llaves en 2015. Para entonces, se habrán cerrado los exámenes de solvencia que Bruselas ha impuesto a todos los países de la UE.
Agujero sin parangón
La temporización es un requerimiento de la gran banca española, eterna aspirante en la subasta. El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha reconocido en el Congreso de los Diputados que el agujero en la entidad catalana “no tiene parangón en el sistema financiero español”.
“Hemos inyectado 12.000 millones de euros a una entidad que era cuatro o cinco veces más pequeña que Bankia y a Bankia le inyectamos 22.000”, ha contestado en tono desafiante a los diputados socialistas que le han preguntado por el futuro de la caja de ahorros.
CatalunyaCaixa ha tenido hasta su nacionalización presidentes de la órbita del PSC, como Narcís Serra y antes Antoni Serra Ramoneda.