El Gobierno cronifica los ERTE durante la nueva normalidad
Trabajo deja la puerta abierta a alargar los ERTE hasta finales de año para evitar despidos masivos por la crisis generada a raíz del coronavirus
El Gobierno ha decidido aprobar “con rapidez” una nueva prórroga de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), que han afectado a más de 4 millones de personas durante la pandemia. El nuevo límite temporal será esta vez el 30 de septiembre con tal de evitar por más tiempo los despidos masivos a causa las medidas restrictivas de el coronavirus en España.
El periodo coincide con la nueva normalidad, que empezará el 22 de junio al terminar el estado de alarma, y que se alargará, al menos, hasta otoño, cuando haya un tratamiento más avanzado contra la Covid-19 o una vacuna efectiva. Pero no es solo coincidencia: mientras la normalidad no sea total, en vez de nueva, la actividad no podrá retomarse totalmente, por lo que los ERTE de fuerza mayor serán la única salida de muchas empresas y trabajadores.
Y es que un gran número de empresas de sectores muy afectados por la crisis —hostelería, comercio, turismo, restauración, automóvil y auxiliares, mayoritariamente— van a necesitar ampliar el periodo de ayudas más allá de la fecha pactada hasta la actualidad del 30 de junio.
El tema fue tratado en una reunión el pasado miércoles entre el Ministerio de Trabajo, la patronal y los sindicatos mayoritarios. Entonces, el departamento de Yolanda Díaz comunicó su intención de llevar esta nueva prórroga al Consejo de Ministros el próximo martes, según señalaron fuentes cercanas a la negociación.
Por el momento, solo 700.000 trabajadores afectados por ERTE han retomado su actividad habitual —del total de los 3,3 millones de afectados el pasado abril—. En Catalunya, superan los 118.000. Desde el inicio de la pandemia, en marzo, los afectados superan los 4 millones.
Trabajo va a enviar en breve un texto —cerrado con Hacienda, Asuntos Económicos e Inclusión, a CEOE, Cepyme, CCOO y UGT— sobre cómo serán los ERTE, quiénes se podrán acoger y qué cobertura ofrecerán a empresas y trabajadores.
Además, el Gobierno deja la puerta abierta a revisar más adelante la conveniencia de llevarlo a finales de año, en función de varios factores que puede influir a partir de ahora como, por ejemplo, la campaña de verano.
Los sindicatos piden que se alarguen hasta septiembre
La celeridad con la que el Gobierno se está tomando esta prórroga va en consonancia con las exigencias del presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, cuya patronal aspira a que los ERTE lleguen hasta finales de año.
Garamendi reclamó el martes más flexibilidad a la hora de facilitar la entrada y la salida de trabajadores afectados por los ERTE. Mientras que UGT avisó que se oponían a esta fórmula de “ERTE acordeón”, reclamando que las modificaciones sean concretadas con los representantes de los trabajadores.
CCOO advierten que este tipo de desafectaciones de ida y vuelta no tienen que ver con la fuerza mayor y debe entenderse como un ERTE por causas objetivas, al tiempo que apoyan la prórroga hasta septiembre.
En cuanto a los cambios que quiere hacer el Ejecutivo en la reforma laboral, Díaz apuntaba la semana pasada que los datos laborales de la pandemia han puesto de manifiesto que es “imprescindible” cambiar la legislación laboral en España porque hay normas “que han precarizado absolutamente el mercado laboral” y han “agudizado” la contratación temporal.
“En esta crisis de alguna manera hemos esquivado la reforma laboral de 2012”, ha apuntado la ministra, recordando que el Ejecutivo está trabajando en paralelo en proyectos legislativos que verán la luz “en breve”. Entre ellos, está la regulación del teletrabajo y la protección social a los trabajadores de plataformas digitales.