La economía española mantiene el pulso y el PIB avanzó un 0,8% en el tercer trimestre

El producto interior bruto (PIB) de la economía española avanzó un 0,8% en el tercer trimestre de 2024 y muestra que la actividad mantiene el pulso, con un vigoroso crecimiento que, en términos interanuales, se ha disparado al 3,4%, la tasa más elevada en año y medio.

De acuerdo con los datos de avance de la Contabilidad Nacional que publica este miércoles el INE, la actividad no se ralentizó en los meses de verano y se mantuvo al mismo nivel que en el segundo trimestre y apenas una décima inferior al alza experimentada por la economía a principios de este año (0,9%).

Ese 3,4% de avance interanual, dos décimas más que el trimestre anterior, coloca a España en su mayor crecimiento desde principios de 2023, justo cuando el tejido productivo comenzaba a enfriarse tras el rebote de la pandemia y por los efectos de la guerra en Ucrania y de la crisis inflacionaria.

La moderación de la inflación –este miércoles se ha conocido un leve repunte de tres décimas, hasta el 1,8%, en octubre- ha provocado también ganancias de poder adquisitivo de los trabajadores que, junto con el crecimiento del empleo, provocan que el consumo privado haya sido un componente clave en el crecimiento de la economía, con un avance del 2,8% interanual.

Además, el sector exterior también está funcionando como motor económico, con las exportaciones avanzando a un ritmo del 5,1% y, en concreto, las de servicios no turísticos subiendo a un ritmo del 12,5%.

En términos de demanda, el consumo interno sumó 0,9 puntos porcentuales, mientras que el sector exterior restó una décima al crecimiento.

En una valoración remitida a los medios de comunicación, el Ministerio de Economía se ha felicitado de estos datos porque «reflejan la fortaleza y el crecimiento equilibrado de la economía española».

«España sigue haciendo compatible el mayor crecimiento económico entre las economías desarrolladas con una inflación que se ha moderado de forma notable en los últimos meses. Esto está permitiendo que estos excelentes datos macroeconómicos se están trasladando también a los datos micro, mejorando la situación y perspectivas económicas de nuestras empresas y familias», apuntan desde el departamento que dirige Carlos Cuerpo.

En comparación interanual, la demanda nacional ha sumado 2,7 puntos al crecimiento, por 0,7 puntos del sector exterior. El consumo aceleró en cuatro décimas hasta el 3,3% interanual, mientras que el de los hogares se situó en el 2,8%, tres décimas más. Creció a un ritmo más elevado el de las Administraciones Públicas, que se incrementó un 4,7%, siete décimas más que en el segundo trimestre.

La inversión ha moderado ligeramente su crecimiento: la formación bruta de capital registró un avance del 0,8%, cuatro décimas menos que el trimestre anterior.

Desde la óptica de la oferta, todos los grandes sectores de actividad presentaron tasas interanuales positivas. Así, el valor añadido bruto de las ramas industriales aumentó un 4,1%, y dentro de las mismas, la industria manufacturera lo hizo en un 4,6%. El valor añadido bruto de la Construcción creció un 2,4% respecto al tercer trimestre de 2023; el de los Servicios, un 3,6%; y el de las ramas primarias, un 7,5%.