Actualizado
Cuerpo mantiene la ortodoxia Calviño: frena la intención de Yolanda Díaz de subir el impuesto a la banca
Economía no contempla endurecer el impuesto a la banca tras los beneficios récord, mientras Díaz y Sumar reclaman "blindarlo"
El nuevo ministro de Economía, Carlos Cuerpo, quiere empezar con buen pie su relación con la banca, un sector que, sin duda, le traerá numerosos quebraderos de cabeza durante el mandato. De momento, en el departamento apuestan por mantener el impuesto temporal a las entidades tal y como está, aunque adaptándolo a las nuevas circunstancias cuando se reforme el gravamen para hacerlo permanente.
Fuentes del Ministerio aseguraron que no está en su agenda una reforma para «endurecerlo», como ha reclamado la vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, a la vista de los resultados extraordinarios de la banca el pasado 2023.
«Los beneficios récord demuestran la necesidad de seguir reforzando el impuesto a la banca. Vamos a recaudar más de 600 millones de euros que servirán para mejorar los servicios públicos. Toca blindarlo y hacerlo permanente», escribió la también ministra de Trabajo a través de su cuenta en X (Twitter).
La línea del departamento que ahora dirige Carlos Cuerpo no cambia con respecto a la establecida por la exvicepresidenta Nadia Calviño. El discurso oficial era -y es- que estos gravámenes se revisarán para hacerlos permanentes, además de revisar su configuración para integrarlos en el sistema tributario. Hasta la fecha son prestaciones patrimoniales de carácter no tributario, pero el acuerdo con el PNV exige su reforma para poder concertarlo con las Haciendas vascas.
Las fuentes consultadas insisten en que, de momento, los cambios que están previstos son los del gravamen de las energéticas, que incorporará deducciones para las inversiones verdes. ¿Sería posible hacer algo así con el tributo bancario? No está encima de la mesa.
La literalidad del acuerdo entre el PSOE y Sumar que firmaron Pedro Sánchez y Yolanda Díaz el pasado octubre indica que el Gobierno revisará ambos tributos «con el objetivo de readaptarlos y mantenerlos una vez que expire su periodo de aplicación actual, para que ambos sectores sigan contribuyendo a la justicia fiscal y al sostenimiento del Estado de bienestar». También recoge el mantenimiento del impuesto de solidaridad a las Grandes Fortunas.
En materia fiscal, Sumar está presionando para que se creen nuevos impuestos de cara a 2024: no solo acabar con algunas deducciones, sino emular el impuesto para cubrir el Patrimonio con uno que permita cobrar lo que las comunidades dejan de recaudar por Sucesiones y Donaciones, así como un «impuesto inteligente» para gravar los márgenes empresariales.
Cuerpo engrasa relaciones con la banca
Cuerpo, que llegó al cargo el mes pasado tras tres años a las órdenes de Calviño -primero, como director de Análisis Macroeconómico y, después, como secretario general del Tesoro-, arrancó enero con reuniones con los portavoces parlamentarios y, lo más importante, con encuentros con los líderes de los principales bancos del país. Así, ya se ha encontrado con la presidenta del Santander, Ana Patricia Botín; o con el líder del BBVA, Carlos Torres, entre otros.
La consejera delegada de Bankinter, María Dolores Dancausa, ya anticipó una mejor relación con Cuerpo -una «persona accesible, preparada, conciliadora e inteligente»- que con su antecesora Calviño. Con todo, el impuesto a la banca va a suponer un escollo a la hora de engrasar las complicidades con el sector financiero.
En la presentación de resultados de 2023, la presidenta del Santander criticó que el gravamen siga en vigor asegurando que «ningún país del mundo tiene un impuesto previsto sobre los beneficios de los bancos en 2024«, como es el caso de nuestro país. Torres, durante la presentación de sus cuentas, insistió en que la tasa es «contraproducente con la economía».
De las principales entidades financieras que han presentado sus cuentas, Bankinter ganó 845 millones , el BBVA obtuvo unas ganancias de 8.019 millones de euros y el Santander obtuvo 11.076 millones de euros.